La bailarina María Elena Filomeno quiso inscribirse en el registro de artistas del Ministerio de Culturas, pero su solicitud fue rechazada por su nacionalidad peruana. Ella ganó un Premio Eduardo Abaroa en 2013 y tiene residencia indefinida en el país. “Expliqué que vivo aquí hace más de 15 años, que hice mi carrera aquí, pero no contemplan eso en el registro de artistas”, indicó la también coreógrafa, que el viernes trató de inscribirse.
Filomeno precisa estar registrada porque el principal beneficio es que los artistas ingresan a un régimen simplificado de impuestos. Como no tiene el carnet, debe pagar el 16% de las recaudaciones. “Me salió un contrato y precisaba contar con este apoyo. Es increíble, pero los requisitos son fáciles, pero por mi nacionalidad no me dejan, aunque me siento muy boliviana”, explicó.
Filomeno protestó a través de su cuenta de Facebook: “Me siento bastante indignada y desilusionada (…). Toda mi carrera la hice aquí en Bolivia y hace por lo menos diez años apuesto porque se reconozca mi trabajo (…). Me siento discriminada”. Sus palabras contaron con el apoyo de colegas que como ella tratan de registrarse para obtener el beneficio para quienes producen en Bolivia.
“Es una ley discriminatoria. Intenté registrarme tres veces y hasta mandé una carta en diciembre del año pasado, la que nunca me respondieron”, comentó Martha Monzón, reconocida actriz, dramaturga y formadora argentina, quien radica en el país hace más de 25 años. Monzón enfatizó que el principal problema es que para contar con el registro se precisa la doble nacionalidad. “Todas las veces que he querido registrarme me han dicho extranjera. La doble nacionalidad dura dos años, entre trámites, abogados, certificados y legalizaciones se precisan como $us 1.500, plata que no puedo pagar”, expresó la artista.
Otra actriz con el mismo problema es la italiana María Teresa Dal Pero. “Me dijeron que no puedo tener acceso a este registro porque soy extranjera, a pesar de que resido desde 1992 aquí y tengo reconocimientos”.
Estos artistas extranjeros que residen y producen en el país —no son los únicos— piden que exista algún mecanismo para reconocer su aporte, como el de sus colegas, a la cultura boliviana.
La Razón se contactó con el Ministerio de Culturas. “El Ministro (Pablo Groux) tiene conocimiento sobre las denuncias en redes sociales. Me dijo que se está trabajando en un instructivo complementario que permitirá el registro de artistas extranjeros con más de tres años de residencia en el país”, declaró Claudia Mollinedo, jefa de Comunicación de la institución. Según se informó, la normativa se haría pública hasta la siguiente semana.