La Revista

Monday 22 Apr 2024 | Actualizado a 13:09 PM

Huellas de animales prehistóricos corren riesgo por actividad humana

El llamado Cal Orcko (cerro de cal, en quechua), es uno de los yacimientos de huellas fósiles más grande del mundo. Está en las afueras de la ciudad de Sucre, en el sureste de los valles de Bolivia.

/ 2 de octubre de 2014 / 15:01

En un cerro en el sureste de Bolivia hay cerca de 460 rastros y más de 6.000 huellas de animales, algunas de hasta un metro, que datan de hace más de 65 millones de años. Pero este tesoro paleontológico está amenazado por la actividad humana.

Este cerro, llamado Cal Orcko (cerro de cal, en quechua), es uno de los yacimientos de huellas fósiles más grande del mundo. Está en las afueras de la ciudad de Sucre, en el sureste de los valles de Bolivia.

Sobre la explanada de tierra se observan hileras de pisadas en diferentes direcciones. Los diámetros varían en tamaño y las formas reflejan las patas principalmente de saurópodos titanosaurios, terópodos, ornitópodos y anquilosaurios, aunque se estima que hay muestras de más de 20 especies en total.

«Como yacimiento paleontológico de huellas, Cal Orcko es uno de los más grandes del mundo», asegura el investigador boliviano Omar Medina, integrante de la local Sociedad Científica Universitaria de Paleontología (Sociupa).

El lugar recibe 120.000 visitas al año. «Es el yacimiento paleontológico más grande del mundo y para mí es lo máximo, los turistas se van alucinados, sorprendidos», afirma Juan Carlos Molina, vecino del lugar.

Pero, a poca distancia de este sitio natural, se encuentra la fábrica de cemento Fancesa, que sin cesar saca de la cantera vecina piedra caliza. Los dueños de la compañía son la gobernación regional, la alcaldía de la ciudad y la universidad estatal local.

«Se ha afectado bastante el farallón, porque han sido muchos años de trabajo sacando la materia prima», explicó a la AFP Elizabeth Baldivieso, administradora del Parque Cretácico, la fundación privada que resguarda el lugar.

Baldivieso afirmó que hay una parte norte de la zona en peligro y una parte sur que será resguardada.

Empero, el secretario de Turismo y Cultura de la Gobernación de Chuquisaca, Juan José Padilla, aseguró a la AFP que esta es «una visión un poco alarmista del tema», argumentando que Fancesa se comprometió a apoyar la preservación del lugar.

Las rastros (462) o la hilera de pisadas que registra Cal Orcko son mayores a los existentes en otras reservas como Lark Quarry (Australia), Yanguoxia (China) o Altamira (España), asegura una investigación del Parque Cretácico.

Huellas en una superficie casi vertical

Los rastros registrados en este farallón de cal, que mide 1,5 km de largo por unos 120 metros de altura, curiosamente están sobre una roca de 72 grados de inclinación.

Que estos rastros aparezcan sobre una superficie casi vertical es un fenómeno que siempre provoca curiosidad en los visitantes, cuenta Medina, pero se explica por el movimiento de las placas marinas.

«Una vez que se extinguen los dinosaurios en el Terciario, nuestro planeta comienza a sufrir grandes movimientos orogénicos, movimientos de placas teutónicas, de deslizamiento de continentes y las placas marinas comienzan a provocar aquí una suerte de acordeonamientos», dijo el experto.

En otras palabras, hasta hace 65 millones de años, al concluir el Cretácico, este cerro era una laguna, habitada por diferentes especies que dejaron sus huellas sobre el barro. El espacio acuífero se secó, las señales quedaron selladas y finalmente los movimientos orogénicos colocaron la planicie en posición casi vertical.

La visualización de las huellas comenzó a mediados de la década de los años 1990, por la misma acción del tiempo, la lluvia y la erosión. Además, parte del cerro quedó al descubierto luego de que una empresa local del cemento explotó la cantera de piedra caliza, colindante al lugar.

Bolivia postuló en 2009 Cal Orcko a la Unesco, como patrimonio natural de la humanidad, pero la entidad la rechazó, pues observó justamente las políticas de preservación.

Tras las objeciones, se reformulará la carpeta de proyecto y se acudirá nuevamente a esa instancia en 2015.

Comparte y opina:

Luis Arce cumple 100 días en el poder

Ministro de Economía durante gran parte del mandato de Morales (2006-2019), Arce asumió la presidencia el 8 noviembre de 2020 tras vencer a sus rivales en los comicios del 18 de octubre con el 55,11% de los sufragios.

/ 16 de febrero de 2021 / 17:44

El presidente izquierdista de Bolivia, Luis Arce, cumple este martes 100 días en el poder en plena crisis del COVID-19 y manteniendo un delicado equilibrio con su mentor, el influyente exmandatario Evo Morales.

Ministro de Economía durante gran parte del mandato de Morales (2006-2019), Arce asumió la presidencia el 8 noviembre de 2020 tras arrollar a sus rivales de centro y derecha en los comicios del 18 de octubre con el 55,11% de los sufragios.

Su llegada al poder con las banderas del partido Movimiento Al Socialismo (MAS) puso fin a la presidencia interina de la derechista Jeanine Áñez, y permitió el regreso a Bolivia de Morales después de un año exiliado en México y Argentina.

Todo hacía suponer que por su fuerte personalidad, el exgobernante indígena y leal amigo de Venezuela y Cuba manejaría el poder en la sombra.

Pero el nuevo mandatario ha buscado mantener distancia de Morales y ha evitado copar los puestos del gobierno con la gente más allegada al exmandatario, que dejó el poder en medio de una convulsión social por denuncias de fraude electoral en su favor cuando buscaba un cuarto mandato.

Durante la campaña electoral, Arce aseguró que Morales no tendría «ningún papel» en su gestión y en su discurso inaugural ni lo mencionó.

Y aunque recibió críticas de sus rivales por designar en algunos cargos a varios allegados del expresidente -su hija Evaliz Morales ahora es funcionaria de la Procuraduría General-, la mayoría fueron nombrados como embajadores y ninguno en su gabinete.

El influyente senador oficialista Leonardo Loza respondió a las críticas diciendo que los exfuncionarios de Morales coadyuvan en la actual gestión y que «la derecha no tiene moral para criticar».

Sin embargo, Oscar Ortiz, exministro de Economía durante el gobierno de Áñez, afirma que el exmandatario opina sobre temas del gobierno como si diera instrucciones y que pretende ser «el poder detrás del trono».

Poder de las bases

Morales, que ascendió al poder sobre los hombros de su activismo en el sindicalismo de los productores de hoja de coca, se encontró con un MAS renovado, con el poder ahora en manos de las bases, ya no del líder fundador.

En varias ciudades sufrió el rechazo de los militantes a sus designados para candidatos a gobernadores o alcaldes en los comicios de marzo, pero la zanja quedó claramente ilustrada cuando una silla impactó en su cabeza durante una asamblea del partido en diciembre en su bastión cocalero de Chapare.

«Hay una recuperación del poder en manos de los sectores sociales (…), el partido está recuperando su propia personalidad», dice a la AFP la socióloga María Teresa Zegada.

Morales aspira a seguir conduciendo el partido y ser el próximo candidato presidencial del MAS en 2026, según Carlos Cordero, académico de la estatal Universidad Mayor San Andrés y de la Universidad Católica.

Rol del Estado

Pero en las políticas, Arce ha retomado la idea de su mentor de fortalecer el papel del Estado en la economía como vía para impulsar el desarrollo.

Su gobierno se concentra en reactivar una millonaria planta de urea y amoníaco en la región cocalera del Chapare (centro), el bastión de Morales, e industrializar el litio en el Salar de Uyuni (suroeste), la planicie de sal más grande del mundo, proyectos que requieren inversiones públicas masivas.

Tras la violencia poselectoral de 2019, que dejó unos 35 muertos, y las tensiones durante el gobierno de Áñez, Arce «ha logrado la paz social», dijo Zegada.

Pero «se necesitan medidas para la recuperación económica, para la estabilidad económica, es lo que está faltando», agrega la profesora de la estatal Universidad Mayor de San Simón.

Bolivia acumula 237.000 contagiados de covid-19 y 11.200 fallecidos, con una población de 11,5 millones de habitantes

Frente a una economía golpeada por la pandemia -se espera una contracción del PIB de 8,4% y un déficit fiscal de 12,3% en 2020-, el gobierno decidió el pago de un bono de 1.000 bolivianos (144 dólares) a desempleados y familias pobres.

Pero aún está pendiente su propuesta para reactivar la minería, principal actividad exportadoras del país, dijo Cordero.

Comparte y opina:

Últimas Noticias