Miranda Foster: ‘Nos estamos embarcando en un viaje a lo desconocido’
La intérprete encarna a Gertrude (Gestrudis), la reina de Dinamarca y madre del joven Hamlet, quien la desprecia por haberse casado tras la muerte de su padre con el hermano de éste.
La actriz inglesa es conocida por ‘Turnaround’ (1995), ‘Shakespeare’s Globe: Romeo and Juliet’ (2010) y ‘The Merry Wives of Windsor’ (‘Las alegres comadres de Windsor’, 1982). Está casada con su colega Jonathan Guy Lewis. La intérprete encarna a Gertrude (Gestrudis), la reina de Dinamarca y madre del joven Hamlet, quien la desprecia por haberse casado tras la muerte de su padre con el hermano de éste. Actuará en el Teatro Municipal de La Paz este lunes 10.
— ¿Qué fue lo que le llamó la atención para participar de esta gira?
— Ir a todos los países del mundo es una experiencia única. ¿Cómo podría alguien dejar pasar esa oportunidad? Simplemente pensé que era una idea increíble, maravillosa e inmediatamente quise hacerlo.
— ¿Qué le ofrece como actriz el papel de Gertrude?
— Siempre luché para destilar a Gertrude… Pero ella ama a su hijo. Eso es absolutamente crucial. Ella ama a Hamlet. Como dice Claudius: “Ella vive casi por sus miradas”. Y en mi opinión también está locamente enamorada de Claudius. Ella está divida entre el amor por su hijo y el amor por su esposo. Hubo una relación adúltera entre ella y Claudius. Creo que hay suficiente evidencia de eso en el texto. Están completamente encaprichados el uno con el otro… Incluso después de la escena del closet, donde ella se entera de que él mato al viejo Hamlet, aun así ella lo ama y lo protege. Ella sabe que ha matado a su marido por que la ama, así que no deja de amarlo por eso. Pero está muy triste y acongojada desde ese punto en adelante, y ella sabe que sus acciones son la raíz de todo lo siniestro que sucede en la obra. En el transcurso, ella está completamente agobiada por la culpa.
— ¿Cómo piensa que reaccionará el público con Gertrude?
— A diferencia de los otros personajes, ella no dice mucho al inicio de la obra. El reto es construir una vida interna sin tener que decir demasiado. Cuando interpreté a Gertrude en la gira de 2012, que fue en Estados Unidos y México, mucha gente me dijo que acudieron al espectáculo dispuestos a odiarla. Pensaron que ella era demasiado directa, un personaje nada placentero, incluso un personaje maligno. Pero después me dijeron que pudieron entenderla y ser parte de su dilema. Espero que eso se muestre en esta producción. Por supuesto la gente en otros países reaccionará de forma diferente, particularmente en países donde las personas no están familiarizadas a ver a una mujer en escena. Será fascinante.
— ¿Crees que la producción crecerá y cambiará a lo largo de los dos años?
— Definitivamente. Nos estamos embarcando en un viaje hacia lo desconocido; como dar a luz a un niño, o la muerte de un ser querido. Como en cualquier evento de vida importante, no sabes cómo se va a sentir hasta que sucede. Cuando estás embarazada, crees saber cómo va a ser, pero una vez que nace tu hijo es completamente diferente a como lo habías imaginado. No creo que podamos prepararnos para esto, así que simplemente vamos a tener que vivir el momento. Pero si sé que los papeles rotativos van a hacer que la obra vaya evolucionando. Compartir papeles ha sido un gran ajuste, tuvimos que dejar nuestros egos en casa, todos tuvimos que prestarnos algo de los demás, tomando cosas que admirábamos de la interpretación del otro, y la química es completamente diferente día tras día. Se siente de alguna forma como una verdadera actuación, constantemente respondiendo a situaciones que van cambiando, más que simplemente repetir algo. En el Globe hay una relación especial con el público, una maravillosa conexión entre el actor y el público que hace que cada espectáculo sea distinto al anterior. Espero que podamos recrear esto en la gira.
— ¿Cuáles son los retos y expectativas de estar fuera de casa durante dos años?
— Me encanta la aventura y sé que quiero estar despierta todo el tiempo, así que un gran reto es ¡mantenerme estimulada y saludable! En 2012, en Nueva York, no creo haber dormido. Íbamos a trabajar y luego directamente a interactuar con la gente que vivía ahí… es tan diferente a estar de turista. Puedes llegar a involucrarte en el país, incluso si estás por un corto periodo de tiempo. Imagino que la compañía se ha unido mucho, como una familia. Siempre hay momentos durante la gira cuando alguien desea estar acostado solo en su habitación en el hotel, pero con 16 personas, nunca vas a estar solo.