El cantante de One Direction Harry Styles prohibió a los asistentes a la celebración de su 21 cumpleaños, que tuvo lugar este sábado en el Lulu’s Café de Los Ángeles, utilizar Twitter para evitar que los detalles de la exclusiva fiesta fueran desvelados.

Tanto las exnovias del intérprete Cara Delevingne, Kendall Jenner y Kimberly Stewart como su actual pareja sentimental, la modelo de Victoria’s Secret Nadine Leopold, quisieron acompañarle durante la velada, por la que habría desembolsado 300.000 dólares (260.000 euros).

«Es un chico encantador, incluso sus exnovias quieren estar a su lado. Por su buen corazón, todas las chicas con las que ha salido quisieron asistir a la fiesta y ayudarle a celebrar su cumpleaños», explicó una fuente cercana al cantante al periódico Daily Mirror.

La estrella de One Direction, cuya fortuna personal está valorada en 22 millones de dólares, no reparó en gastos a la hora de celebrar su mayoría de edad en Estados Unidos, reservando todo el local donde tuvo lugar la velada, durante la que sus invitados pudieron disfrutar de cupcakes decoradas con la letras ‘H’ mientras se divertían cantando en un karaoke e inmortalizaban la noche sacándose fotos en un fotomatón.

La gran ausente de la noche fue la cantante Taylor Swift -con quien Harry protagonizó una amarga ruptura en 2013-, que no quiso sumarse a la lista de invitados, que sí incluyó a la intérprete Adele, el exfutbolista David Beckham, el líder de Coldplay Chris Martin y la actriz Jennifer Lawrence.