Icono del sitio La Razón

XIV Festival de Bandas se festejó con el anuncio del ‘diablódromo’

La avenida Cívica de Oruro una vez más sintió el impacto  de bronces, de instrumentos folklóricos y voces ayer en el XIV Festival de Bandas de Músicos del Carnaval de Oruro, donde el presidente Evo Morales anunció que construiría un “diablódromo”.

Fueron más de dos horas (10.00 hasta 12.45 aproximadamente) de intenso concierto en el que participaron al menos 6.000 músicos. Después de un momento de fe, convocado por monseñor Cristóbal Bialasic, el ingreso de la imagen de la Virgen del Socavón, el homenaje a los músicos fallecidos en el Carnaval 2014 y la entonación del Himno Nacional del Estado Plurinacional de Bolivia, siguieron los himnos departamentales y el vals Yo quiero un mar, con Llajtaymanta.

El presidente de la Federación Departamental de Bandas Profesionales de Oruro, Juan Boris Villanueva Huanca, dijo que el festival ya es parte de la tradición y que desde hace 13 años se trabaja en el fortalecimiento de la cultura y la interculturalidad, convirtiéndose en un orgullo.

La fuerza y la energía llegaron con el afamado grupo Kalamarka, que se adueñó de la fiesta tocando Pastorcita, A Miami, Aguas claras y Cuando florezca el chuño. La gente y el propio presidente Evo Morales, que asistió al festival, bailaron y aplaudieron.

Morales, durante una pausa, reveló que pretende la construcción de un “diablódromo” (que viene de la danza de la diablada) que sea “mejor que el sambódromo” de Río de Janeiro, considerado el escenario al aire libre más importante del mundo.

“Con el pueblo orureño estamos discutiendo un ‘diablódromo’. Es mi gran deseo y en esta gestión quiero cumplirlo. Necesitamos el terreno, ubicar el lugar, mejor que el sambódromo de Brasil”, declaró a Bolivia Tv.

A su juicio, esa obra es necesaria porque el Carnaval de Oruro crece cada año y es imperioso ofrecer todas las comodidades a los turistas y a los danzarines.  Yara, Llajtaymanta y Norte Potosí unieron su arte al de las más de 80 bandas de música que estuvieron bajo la batuta de Cecilio Choque y Max Choqueticlla Mallcu, directores del concierto.

La selección de diabladas de la Urus, Ferroviaria y de la Auténtica, la ejecución de los tinkus tradicionales, así como las morenadas de la Central Oruro, Cocanis, Ferrari Ghezzi, Mejillones y Pagador formaron parte del repertorio. El epílogo del concierto llegó con Viva, viva mi San José de Óscar Elías, la cueca Viva mi patria Bolivia, considerada el segundo himno nacional, y la Marcha Naval.

Gonzalo Choque Huanca, presidente de la Confederación de Bandas Profesionales de Música, anunció que para la XV versión se invitará nuevamente a Kalamarka, pero también a Los Kjarkas, dos íconos de la música nacional que “seguramente será otro evento musical de éxito como lo fue en esta oportunidad”. El Festival de Bandas nació hace 13 años en la zona sur de la ciudad de Oruro. Uber Montoya, primer presidente de la Federación de Bandas, creó el evento en el que tocaron unos 250 músicos.