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‘Norte estrecho’, en Guadalajara

Norte estrecho, filme dirigido por el boliviano Omar Villarroel y seleccionado para la competencia oficial del 30 Festival Internacional de Cine de Guadalajara 2015 (México), se verá en el evento del 12 al 14 de marzo.

La cinta, que opta por el premio Mezcal que se disputa en el festival, contará en su premier mundial con la presencia de los actores Carmen Salinas, Luis Bredow y Jorge A. Jiménez, informó el mismo director.

“Es una película que expone los dramas de la migración a EEUU, que entró en auge a fines de los años 90 y que aún continúa. Al exponer esta temática, la película se inscribe en la tradición del cine nacional de servir de espejo a los acontecimientos por los que surca nuestra sociedad. Norte estrecho refleja la persecución del ‘sueño americano’, que llevó a muchos bolivianos hacia EEUU”, resalta Luis Bredow, actor orureño que protagoniza el filme.

La coproducción con México, Argentina y EEUU hace que esta quizá sea “la primera película boliviana producida desde los EEUU por migrantes bolivianos y de otros países latinoamericanos. La migración amplía en los migrantes la ‘visión de campanario’, pues constatan que más allá de los particularismos de nacionalidad y origen, existen rasgos que los vinculan a personas de otros países latinoamericanos.  Por eso, los dramas de los personajes son dramas de argentinos, mexicanos y estadounidenses latinos”, agrega Bredow.

Tal inclusión se refleja en la nacionalidad de los intérpretes y productores que están haciendo carrera en la industria cinematográfica de los países involucrados. Entre aquéllos se destacan la actriz mexicana Carmen Salinas (La otra familia, Todo el poder, La misma luna), el boliviano Pablo Fernández (El ascensor, Las bellas durmientes), el mexicano Jorge A. Jiménez (Desdemona: A Love Story, Machete), la productora y actriz estadounidense Melissa Gruver, la actriz y presentadora de Tv boliviana Giselly Ayub (Las bellas durmientes) y los argentinos Federico Saslavsky, Ariadna Asturzzi y Ezequiel Díaz.

“La personalidad de Omar Villarroel, el director y guionista,  fue el argumento definitivo que me incitó a participar en la aventura de rodar esta película. La película existe porque Omar es un hombre extraordinariamente tenaz. Es un trabajador de la imagen que fue muy activo en Cochabamba antes de emigrar a los EEUU, donde fue desarrollando en su profesión”, señala Bredow. “Allí vivió la vida del migrante y tuvo experiencias personales que se reflejan en la película.

Gran parte de ella está basada en hechos reales que Omar vivió o pudo observar de cerca”.

Un equipo de talentos bolivianos

El tarijeño Sergio Bastani (director de Amarillo en Rojo, Amarillo y Verde) es responsable de la dirección de fotografía y Luis Bolívar (Blackthorn, También la lluvia, Olvidados) hace el sonido. La mayor parte del rodaje se hizo en Cochabamba, aunque hay segmentos filmados en EEUU, México DF y Buenos Aires.