El sospechoso de haber intentado asesinar al expresidente estadounidense Donald Trump, también candidato republicano a la Casa Blanca, fue acusado por delitos de posesión ilegal de armas, en su primera comparecencia ante un juez federal del estado de Florida.

Ryan Wesley Routh, de 58 años, fue acusado por posesión ilegal de un arma de fuego y por posesión de un arma con el serial borrado.

Se espera que Routh se enfrente a otros cargos en una comparecencia posterior.

El domingo por la tarde Trump se encontraba en su club de golf en Florida (sur) cuando se escucharon «disparos» cerca, según su equipo. 

Routh fue detenido el domingo después de que un agente del Servicio Secreto advirtiera que el cañón de un rifle apuntaba hacia los arbustos del Trump International Golf Course. 

Los agentes, que estaban desplegados en una burbuja de seguridad móvil que se extendía uno o dos hoyos por delante del expresidente, «se enfrentaron» a un individuo, dijo Rafael Barros, del Servicio Secreto estadounidense. 

Trump resultó ileso.

La policía dijo que Routh huyó en un vehículo y fue arrestado poco después.

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Encontraron un rifle con mira telescópica AK-47, junto con dos mochilas y un equipo de grabación de video, según el sheriff del condado de Palm Beach (Florida), Ric Bradshaw.

Routh se mostró tranquilo durante la breve vista judicial, respondiendo «sí» con voz suave a varias preguntas del juez de distrito Ryon McCabe, del Distrito Sur de Florida.

Según los informes, Routh era un constructor autónomo de viviendas asequibles afincado en Hawai, con un historial de detenciones de varias décadas.

Según medios estadounidenses, publicaba regularmente artículos sobre política y actualidad en las redes sociales, incluidas críticas a Trump.

El magnate republicano atribuye el segundo atentado en su contra a «la retórica» de su rival demócrata Kamala Harris y del presidente Joe Biden.

Trump, de 78 años, se salvó de un primer intento de asesinato en julio.

La campaña presidencial estadounidense continúa este lunes en un país sobresaltado por un segundo presunto intento de asesinato contra el candidato republicano Donald Trump, que lo atribuye a «la retórica» de su rival demócrata Kamala Harris y del presidente Joe Biden.

El sospechoso «se creyó la retórica de Biden y Harris, y actuó en consecuencia», declaró a Fox News. «Su retórica está provocando que me disparen», añadió.

Poco antes Biden pidió «más ayuda» para el Servicio Secreto, la policía de élite encargada de la protección de las personalidades políticas, porque necesita «más personal». 

«Gracias a Dios (Donald Trump) se encuentra bien», declaró el presidente demócrata a periodistas en la Casa Blanca. 

«La máxima prioridad es tener respuestas para comprender cómo el presidente Trump pudo haber sufrido varios intentos de asesinato», comentó en la red social X el jefe republicano de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, estrecho aliado del millonario. 

Trump «no es el presidente en ejercicio, si lo fuera, habríamos rodeado completamente el campo de golf (donde se encontraba el domingo), pero como no lo es, el sistema de seguridad se limita a los lugares elegidos por el Servicio Secreto» que «hizo exactamente lo que tenía que hacer», comentó el domingo el sheriff del condado de Palm Beach (Florida), Ric Bradshaw. 

El domingo por la tarde Trump se encontraba en su club de golf en Florida cuando se escucharon ‘disparos’ cerca, según su equipo. 

Varios agentes del Servicio Secreto «abrieron fuego contra un hombre armado» que estaba cerca del terreno, informaron fuentes de seguridad.

Encontraron un rifle con mira telescópica AK-47, junto con dos mochilas y un equipo de grabación de video. 

Ryan Wesley Routh, un estadounidense proucraniano al que la AFP entrevistó en 2022 en Kiev, fue detenido gracias a un testigo que identificó su coche. El lunes fue acusado de posesión ilegal de armas en su comparecencia inicial.

Una sucesión de hechos fuera de lo común hace que la campaña electoral no tenga parangón en la historia de la democracia estadounidense. Y eso que faltan 50 días para los comicios del 5 de noviembre.

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‘Violencia’

El expresidente Trump, de 78 años, se salvó de un primer intento de asesinato en julio y Joe Biden tiró la toalla y cedió el testigo a su vicepresidenta Kamala Harris, de 59 años, en tan solo unas semanas después de un debate catastrófico.

Cuando las aguas parecían haber vuelto a su cauce los estadounidenses estaban lejos de imaginarse que Trump sería blanco de un segundo intento de asesinato del que según él salió «sano y salvo».

Joe Biden, que dejará el poder el 20 de enero, reiteró el domingo que «no hay lugar para la violencia política ni ninguna forma de violencia» en el país, donde los nervios están a flor de piel.

Según la prensa estadounidense, el multimillonario Elon Musk, partidario de Trump, publicó y luego eliminó un mensaje en su red X en el que planteaba por qué nadie había intentado matar a Harris o a Biden. 

Kamala Harris se declaró consternada por lo sucedido en Florida.

También hubo condenas a nivel internacional, por ejemplo del presidente ucraniano Volodimir Zelenski, muy pendiente de estas elecciones por la cantidad de ayuda militar que recibe de Washington. 

El Kremlin estimó, por su parte, que es una señal de una «intensificación» de la campaña electoral estadounidense.

Lo cierto es que la tensión se puede cortar con un cuchillo.

Desde hace días corren bulos en las redes sociales que afirman falsamente que inmigrantes haitianos de Springfiel, una localidad del estado de Ohio, en el medio oeste de Estados Unidos, roban gatos, perros y otras mascotas para comérselos.

Estas acusaciones, de las que se ha hecho eco Trump en sus mítines y en un debate ante decenas de millones de estadounidenses, provocaron alertas de bomba y cierres temporales de colegios. 

El presidente iraní, Masud Pezeshkian, prometió el lunes usar su poder para garantizar que la policía de la moral no ‘moleste’ a las mujeres, coincidiendo con el segundo aniversario de la muerte de Mahsa Amini. 

«La policía moral no debía enfrentarse (a las mujeres). Haré un seguimiento para que no las molesten», dijo Pezeshkian, un político reformista, en su primera conferencia de prensa desde que asumió el cargo en julio.

El presidente reformista reemplazó al ultraconservador Ebrahim Raisi, fallecido en mayo en un accidente de helicóptero. 

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Las declaraciones de Pezeshkian coinciden con el aniversario de la muerte hace dos años, el 16 de septiembre de 2022, de Mahsa Amini, una joven kurda iraní de 22 años que murió cuando estaba arrestada por presunto desacato del estricto código indumentario islámico.

Su muerte desencadenó meses de protestas en Irán, con cientos de muertos en enfrentamientos y miles de manifestantes arrestados. 

Durante la campaña electoral, Pezeshkian prometió oponerse ‘totalmente’ a las patrullas policiales que se aseguran que las mujeres lleven bien colocado el velo islámico así como a flexibilizar las estrictas condiciones de acceso a internet.

El imperio del Manchester City podría tambalearse en caso de sanción, con amenaza incluso de un descenso de categoría, si le es esquivo el juicio que comienza este lunes en Inglaterra por supuestamente cometer múltiples infracciones deportivas.

El conjunto entrenado por Pep Guardiola, ganador de ocho títulos de la liga inglesa desde 2012, incluidos los cuatro últimos, además de una Champions en 2023, puede ver frenada su exitosa trayectoria en caso de que la Premier League encuentre evidencias en su contra. 

Seis años después de que comenzara una investigación de la Premier League y 19 meses de que se presentaran 115 cargos contra los campeones ingleses, este lunes comienza una audiencia que decidirá el destino del City. 

Un panel independiente analizará las pruebas durante al menos dos meses y es poco probable que se emita un veredicto hasta enero o febrero de 2025 para lo que la prensa inglesa ha denominado el «juicio del siglo» del deporte británico.

Después de preparar su dosier de acusación, la Premier League envió en febrero de 2023 al club del norte de Inglaterra ante una comisión independiente, que ha estado estudiando el asunto para poder preparar la audiencia de ambas partes, que será a puerta cerrada y en un lugar desconocido.

Manchester City está acusado de haberse desviado de las normas financieras de la liga inglesa después de su compra en 2008 por el consorcio emiratí Abu Dhabi United Group (ADUG), que ha permitido al club ganar ocho de sus diez títulos de la liga inglesa.

Un total de 115 cargos

El holding es sospechoso de haber invertido masivamente, más allá de los límites impuestos, haciendo transitar su dinero a través de Etihad, la aerolínea patrocinador del club, que aparece en su camiseta y ha dado el nombre del estadio.

Las investigaciones han levantado sospechas de que el City habría pagado complementos de salarios no declarados a Roberto Mancini, uno de sus exentrenadores, y a varios jugadores.

El Manchester City tiene por otra parte que responder a las presuntas violaciones del ‘fair-play’ financiero de la UEFA (periodo 2013-2018) y de la Premier League (2015-2018).

En total, el club se enfrenta a 115 cargos: 80 infracciones financieras (2009-2018) y 35 suplementarias por presunta falta de cooperación en la investigación.

Las sanciones, si finalmente se producen, pueden ir desde una retirada de puntos hasta la exclusión del campeonato de Inglaterra, donde el City ha sido el campeón en seis de las siete últimas temporadas.

La comisión también podría solo amonestar al club y no imponerle sanciones, pidiendo simplemente al Manchester City que lleve a cabo determinadas acciones correctivas en un plazo determinado.

Everton y Nottingham Forest sufrieron deducciones de puntos la temporada pasada por infracciones de las reglas de ganancias y sostenibilidad.

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Futuro de Guardiola

Un veredicto de culpabilidad podría poner fin al glorioso reinado de Pep Guardiola en el Etihad. 

El técnico del City, que se encuentra en el último año de su contrato, ha respaldado firmemente a sus superiores, aunque anteriormente había dicho que se marcharía si no hubieran sido honestos con él. 

«Si me mientes, al día siguiente no estoy aquí», dijo Guardiola en 2022. 

Las sanciones severas también generarían dudas sobre el futuro del elenco de jugadores estrella del City, incluido el delantero noruego Erling Haaland. 

Otro clubes podrían reclamar títulos logrados por el City, y una compensación, si se demostrara que el club de Mánchester obtuvo ventajas por medios ilegales o poco deportivos.

En caso de que el City recibiera algún tipo de sanción, se crearía una comisión de apelación, aunque no se admitirá la posibilidad de presentar un recurso ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS). 

El TAS anuló en su día la suspensión de dos años de todas las competiciones europeas impuesta al Manchester City en 2020 por incumplimiento de las normas del fair play financiero de la UEFA.

(16/09/2024)