Las reflexiones internas de Franz Tamayo, su convicción y sus ideales son los elementos que se tejen en Tamayo, obra de Percy Jiménez que se verá desde hoy hasta el 28 de junio, los fines de semana, en El Desnivel (Sánchez Lima 2280) a las 20.00. “Es un viaje al interior de Tamayo, lo que le pasa a un hombre como él, que no es cualquier hombre”, explicó Percy Jiménez, dramaturgo y director de la obra.
Entre una de las preguntas que circularon en la mente del teatrista mientras escribía el texto estaban: ¿Por qué Tamayo aceptó ser presidente de la Asamblea Nacional en 1944? “A partir de la especulación de por qué aceptó ese cargo se abre el espacio para construir la obra”, se respondió.
Mientras Jiménez se documentaba sobre la vida e historia del poeta y político Franz Tamayo, identificó que 1944 fue muy importante y sería el escenario cronológico en el que se desarrollaría su historia. “Él era un hombre que creía en sus ideales y en su ética. En 1944 ocurren los asesinatos de Chuspipata después de la revolución de Oruro con Villarroel en la presidencia. Tamayo está de presidente en la Asamblea”.
Para el dramaturgo, quien admira al personaje, siendo un representante de la democracia y legalidad, como mostraba en todo lo que había escrito los diez años anteriores, se siente enfrentado a estos asesinatos, que sucedieron sin que él esté enterado. “La situación política lo encierra en un punto de su existencia y esa situación es dramática”.
En la obra actúan Miguelangel Estellano, Freddy Chipana, Mauricio Toledo y Bernardo Rosado. “Los actores son voces que van construyendo al personaje”. La obra es parte del proyecto “Escenario de reflexión: Apolíticas consideraciones sobre el nacionalismo”. La pieza cierra la trilogía del dramaturgo, iniciada con Los B y Shakespeare de Charcas. La temporada se inicia hoy y continuará mañana, el 30 y 31 mayo, y el 5, 14, 21 y 28 de junio.