Renuncia el director del Archivo Nacional por irregularidades
Digitalización. J. Carlos Fernández es investigado por la Fiscalía; hay indicios de responsabilidad penal
Debido a la investigación sobre irregularidades en la adquisición de un programa de digitalización, el director del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (ABNB), Juan Carlos Fernández, renunció al cargo. Ayer se eligió a su reemplazo, Judith Terán.
“La situación de Fernández ya era insostenible, porque hay un informe sumariante de la Unidad de Transparencia que indica que él tiene que ser cambiado para que no entorpezca el proceso y la investigación de la compra de un software para digitalización”, explicó Homero Carvalho, presidente de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia (FCBCB), institución de la que depende el ABNB.
La autoridad reveló que “este proceso ha pasado al Ministerio Público porque hay indicios de responsabilidad penal y nosotros, como fundación, nos constituimos como la parte querellante”.
Por esta situación, Fernández presentó su renuncia la semana pasada, aunque ésta se haría efectiva el 15 de abril, ya que está con baja médica por un tratamiento.
Las supuestas irregularidades en la compra del programa fueron denunciadas el año pasado tras una auditoría interna de la fundación y los cinco centros nacionales que administra: el ABNB, la Casa de la Libertad, la Casa de la Moneda, el Centro de la Cultura Plurinacional de Santa Cruz, el Museo Nacional de Etnografía y Folklore (Musef) y el Museo Nacional de Arte (MNA), que también perdió a su director interino la semana pasada.
Es por eso que ayer Carvalho viajó a Sucre para posesionar a la subdirectora del ABNB, Judith Terán, como la nueva cabeza interina de la institución. Terán tiene 27 años de carrera en el Archivo. Según informó el presidente de la FCBCB, la nueva directora ingresó junto con el reconocido gestor Gunnar Mendoza y, a lo largo de los años, ha actualizado sus conocimientos.
Esta decisión coincide con la renuncia de Galo Coca a la dirección del MNA el sábado 5 de marzo, que fue reemplazado por José Bedoya, entonces jefe de museo. “En ambos casos se ha elegido personal que ha hecho carrera durante mucho tiempo en los centros nacionales. Son personas que conocen el trabajo que se realiza y son respetadas por sus compañeros”, aseguró Carvalho.
Una vez confirmada la información sobre el cambio en la dirección, Carvalho y Terán convocaron en Sucre a todo el personal para una reunión en la cual se comunicaron las circunstancias del alejamiento de Fernández y se informó sobre las supuestas irregularidades que se cometieron.
Por su parte, el diputado Horacio Poppe, quien denunció el hecho, lamentó que “la catedral de la cultura ahora se haya convertido en un antro de corrupción”. Fundamentó esa afirmación al asegurar que un informe de auditoría estableció que en 2015 se denunció medio centenar de hechos irregulares como sobreprecio en la asignación de viáticos, en la compra de obras de arte y en la del software. También protestó porque los informes que solicitó a la fundación, en su mayoría, no fueron respondidos.