Unas llegaron esperanzadas en ser mamás, otras volvieron agradecidas por la bendición. La fiesta del Señor de la Santa Vera Cruz —que se inició ayer en Valle Hermoso, a 7 kilómetros de Cochabamba— congregó a los devotos para celebrar la fertilidad.

Miles de creyentes acudieron desde ayer ante esta imagen; las mujeres a pedir hijos, y familias íntegras a rogar por la fertilidad de sus animales y cultivos. El origen de la fiesta es incierto, cuentan que la gente iba con ofrendas a la Pachamama a este lugar, considerado una chakana, pues ahí apareció una piedra con una imagen. Con la llegada del catolicismo se denominó a Jesús crucificado Vela Cruz, que con el tiempo cambió a Señor de la Vera Cruz.

A orillas de la carretera hacia el Valle Alto, las personas se congregaron en torno al templo del Tatala y en un canchón donde se encendieron fogatas para bendecir estatuillas que representaban deseos: vacas, toros, productos agrícolas y muñecas, simbolizando a bebés.