El cine busca el filón de los videojuegos
Hollywood mira con interés a los videojuegos como nuevo filón de historias, aunque con recelo por el moderado éxito de los que han dado hasta ahora el salto a la gran pantalla.
La adaptación al cine del videojuego «Warcraft», que se estrena este jueves en España, busca ser el punto de inflexión que inicie una tendencia de alta rentabilidad para estas películas, tras los buenos datos de «Angry Birds» y a la espera de «Assassin’s Creed», que llegará a los cines en diciembre.
Hollywood mira con interés a los videojuegos como nuevo filón de historias, aunque con recelo por el moderado éxito de los que han dado hasta ahora el salto a la gran pantalla.
Sin embargo, las críticas no han sido muy benevolentes con «Warcraft», una película con un elevado presupuesto de 160 millones de dólares y al que estiman una recaudación de 25 millones en su primer fin de semana en Estados Unidos, donde se estrena el día 10.
Comparando con las películas más de moda en estos momentos, las de superhéroes, la última entrega de X-Men consiguió 65 millones de dólares solo en EE.UU. en su primer fin de semana en salas, cifra que se elevó a 223 millones en el caso de «Captain America: Civil War».
Unas cifras que palidecen respecto a las que maneja la industria de los videjuegos -con unas estimaciones de ingresos globales de 107.000 millones para 2017, según los datos del Global Games Market Report-.
«Call of Duty: Blcks Ops II» recaudó 500 millones de dólares en un solo día, con 7,5 millones de unidades facturadas, y «Grand Theft Auto V» estableció el récord en 800 millones en 24 horas con 11,21 millones de copias vendidas.
En el caso de «Warcraft», con una historia que recuerda a «Game of Thrones», las cifras son diferentes porque se juega en línea, aunque es uno de los más populares de la última década y alcanzó en 2010 los 12 millones de usuarios regulares.
La película, dirigida por Duncan Jones -hijo de David Bowie y responsable de películas de bajo presupuesto como «Moon» o «Source Code»-, podría ser sin embargo un enorme fracaso comercial para los estudios Universal, si se confirman las pesimistas previsiones.
Mientras, «Angry Birds», un filme con un presupuesto mucho menor, de 73 millones de dólares, y por el que pocos apostaban, lleva recaudados 229 millones de dólares desde su estreno, el 20 de mayo.
La película de los pajarillos que protagonizaron un juego que ha alcanzado los 1.000 millones de descargas, principalmente en su versión para móviles, ha sido un éxito inesperado.
Un dato destacable además por el hecho de que las películas salidas del universo de los videojuegos no han sido lo taquilleras que esperaban los grandes estudios.
A la espera de lo que consiga «Assassin’s Creed», rodeada de una enorme expectación y protagonizada nada menos que por Michael Fassbender, Marion Cotillard y Jeremy Irons, los videojuegos han resultado mucho menos rentables en la taquilla cinematográfica que los superhéroes llegados del cómic.
Una de las primeras adaptaciones fue en 1994 la de «Street Fighter», que se basaba en un conocido juego de lucha y que contaba con el atractivo de Jean Claude Van Damme, pero que pasó bastante desapercibida pese a no ser un total fracaso.
«Mortal Kombat» aguantó dos entregas, pero el primer título que contó con unos seguidores fieles fue «Resident Evil» que ha contado con cinco largometrajes (entre 2002 y 2012) y que tendrá su cierre el próximo año con «The Final Chapter», con Milla Jovovich resistiendo en el reparto.
En 2001 también hubo otra película que dio que hablar, «Lara Croft: Tomb Raider», aunque fue más por Angelina Jolie que por los méritos de la cinta.
Aunque su personaje de aventurera en lugares exóticos sigue interesando al cine y ya se ha anunciado una nueva película, con diferente protagonista: la sueca Alicia Vikander, la actriz de moda del momento.
Ella encabezará «Tomb Raider» mientras que su pareja, Michael Fassbender, hará lo propio con «Assassin’s Creed». Ambos son dos de los nombres más populares del cine actual, lo que da prueba del empeño de los estudios con el cine de videojuegos.
Y otro que insiste con el género es Jake Gyllenhall, que no tuvo bastante con las críticas que recibió por «Prince of Persia» (2010) y ahora regresa al universo de los videojuegos con «The Division».
A su vez inspirado tanto en hechos reales como en la literatura de Tom Clancy.
Proyectos que dejan claro que Hollywood cree firmemente en que los videojuegos pueden ser su próximo filón. Si «Warcraft» es el primero en demostrarlo, está por ver. (03-06-16)