El hermano menor de Catalina de Cambridge, James Middleton, ha hecho todo lo posible por mantenerse en un discreto segundo plano, a diferencia de su hermana Pippa, para que su relación con la presentadora de televisión Donna Air no repercuta de ninguna manera en la imagen pública de su famosa hermana y, por ende, en la de la familia real británica, pero eso no significa que de vez en cuando no quiera hacer partícipe a la opinión pública del amor que siente por su actual pareja y, ahora, del entusiasmo que siente ante la idea de contraer matrimonio con ella.

«La verdad es que ahora estamos planteándonos cuál será nuestro siguiente paso. Amo a Donna, la quiero mucho, y a decir verdad la palabra matrimonio no me asusta en absoluto, aunque tampoco es algo que considere fundamental para nuestras vidas», reveló el joven de 29 años en una entrevista al diario The Daily Mirror.

A pesar de sus intentos por no acaparar excesivo protagonismo en la crónica social de su país, James no dudó en salir a la palestra hace unos meses para desmentir con rotundidad los rumores que empezaron a circular en torno a una supuesta ruptura de la pareja, un tema del que tuvo que volver a pronunciarse poco después para expresar con claridad que Donna, madre de un niño de 13 años fruto de un romance anterior, le hacía «muy feliz» y que estaba más que dispuesto a estrenarse en la paternidad a su lado.

«Somos dos personas con mucha determinación, con propósitos muy concretos en la vida, así que hacemos y haremos todo lo posible por seguir evolucionando y hacer progresos. La verdad es que ella me hace muy feliz y yo creo que la hago feliz a ella. Quiero hijos, lo he dicho antes y lo mantengo, y estoy seguro de que los tendré. Aunque habrá que esperar hasta que estemos preparados», explicaba hace unos días al periódico Daily Mail.

Otra de las razones por las que James trata de pasar desapercibido y llevar una vida relativamente normal al margen de los medios parece estar íntimamente relacionada con el papel que ha jugado tradicionalmente en su familia, ya que él mismo reconocía recientemente que siempre se vio eclipsado por el carácter y la popularidad de sus hermanas mayores al tiempo que estas intentaban controlar cada uno de sus movimientos.

«Siempre he bromeado con la idea de que tengo tres madres en vez de una. Mis hermanas me tenían vigilado constantemente, tanto en casa como en el colegio, y era difícil poder salirme con la mía cuando se me ocurría alguna travesura. También he vivido de alguna manera bajo su sombra. La gente solía decirme: ‘Eres el hermano de Pippa y de Catherine, ¿verdad?’. Había personas que no acababan de creer que fuera un Middleton», manifestaba. (07/11/2016)