“Qué lejos estoy, qué lejos estoy de mi ansiedad, mi río, mi sol, mi cielo llorando estarán”… resuena una de las piezas más entrañables de Nilo Soruco, que data de 1974. Hoy, el documentalista Jonás Michel reconstruye la historia del tema y de su creador.
La caraqueña es un himno desgarrador y esperanzador al mismo tiempo que nació en la capital de Venezuela, cuando Soruco estaba exiliado. Eran años de fuego. De cuando el Plan Cóndor iba por la región y por Bolivia dejando un reguero de sangre. Hugo Banzer mandaba en el país y sacó de la nación a gente rebelde, como Soruco.
Han pasado 45 años y la pieza aún se escucha con nostalgia. Jonás Michel, productor de J Train Productions, decidió crear una nueva versión de la canción; pero mientras charlaba con un cantautor salteño… Michel cayó en cuenta de que una nueva versión no era suficiente. “Nos dimos cuenta de que La caraqueña era una puerta para poder ingresar y ver lo que era la vida de Nilo Soruco”, explicó el productor.
Luego se puso manos a la obra y decidió reconstruir la historia de quien fuera Premio Nacional de Cultura en 2003.
“Ya fui a Caracas. Estuve dos semanas allí buscando información, contactando gente y recorriendo las calles. El viaje a Caracas fue súper interesante y era para enfrentarme a una ciudad nueva… También hay que entender a la Caracas de los años 70, cuando Nilo vivía allí; y también entender a la ciudad de Tarija y a Bolivia. No solo es contar cuento, es un poco de docuficción; no quiero inventarme nada… me refiero a que va a haber recreación de contenido”.
El primer viaje no ha sido suficiente y ahora Michel alista otra incursión a Caracas. Aunque en Bolivia también ha realizado entrevistas a gente que ha conocido a Soruco y que sabe de su obra y su postura política.
La vida y obra de Soruco son un mismo tema. Así, las canciones La vida es linda, Ya la pagarás y La caraqueña hablan de la dictadura en el país.
Quedó, desde entonces, plasmada musicalmente la frase: “Nunca mal duró cien años ni hubo pueblo que resista”.
El documental de Michel va más allá de la canción. “La caraqueña es la puerta para transportarnos a la historia; va a ser como una línea de tiempo que estamos usando con la canción. Es un tema que se ha hecho historia y hay que resignificar esto…”.
Nilo Soruco falleció un año después de recibir el Premio Nacional de Cultura. Tenía 76 años eso sí… su legado sobrevive a su muerte.