Luis Rico ofrece sus ‘Testimonios con guitarra’
Rico es un libro de anécdotas viviente. “Una noche estaba a punto de empezar un concierto en la Peña Naira y viene Liber Forti (gestor cultural y teatrista) que me dice ‘carajo Lucho, ¿cómo vas a permitir esto?’...”.
La noche del 23 de junio de 1967 fue una de las más crueles para Bolivia: René Barrientos atacó las minas de Catavi. Tras conocer la noticia, un estudiante de Economía cambió su destino y se dedicó a la música. Hoy presentará sus Testimonios con guitarra.
“Se nos enfrió la noche más fría del año”, comentó Luis Rico al recordar lo que sucedió 53 años atrás. Con la misma voz gruesa sentenció: “Tenía la necesidad de contarle al país lo que sucedía”.
Y nacieron piezas inmortales, como Coplas de la sequía que narra la vida de quienes han llegado a las ciudades provenientes de los pueblos cercanos a nevados. Rico recuerda que en Chulumani un extraño se le acercó y le pidió que toque su pieza, para que vea cómo pisaban coca en un pueblito… al compás de la canción más conocida como El Pisacoca. “Pero por supuesto que no fui”.
Y ahí también está El funeral del río, tema inspirado en el Choqueyapu y que relata la agonía del río en La Paz debido a la contaminación. El poeta Coco Manto le ayudó con la letra, desde Ciudad de México.
Rico es un libro de anécdotas viviente. “Una noche estaba a punto de empezar un concierto en la Peña Naira y viene Liber Forti (gestor cultural y teatrista) que me dice ‘carajo Lucho, ¿cómo vas a permitir esto?’…”. En el público estaba Klaus Barbie Altmann (El carnicero de Lyon, hombre buscado por crímenes durante la Segunda Guerra Mundial). El cantautor tupiceño cuenta que le pidió que salga del recinto para que empiece el show. Y así fue.
Otra historia de este arsenal de historias es la controversia que, explica, tuvo con el expresidente Evo Morales. Eran amigos e incluso hablaron de organizar un gigantesco evento cultural en Chapare. Hasta que el Gobierno decidió hacer una carretera en el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro-Sécure (TIPNIS) y la canción Coraje fue un himno de quienes decidieron enfrentarse al proyecto del TIPNIS.
Estas historias son apenas algunas perlitas que están escritas en el libro Testimonios con guitarra, que se presenta esta noche en el Espacio Simón I. Patiño que está ubicado en Sopocachi, (avenida Ecuador entre calles Rosendo Gutiérrez y Quito).
La obra es una producción de Papalote Producciones y La Perra Gráfica.
“El libro está compuesto de siete capítulos que cubren distintos momentos de la carrera artística de Luis. Sin embargo, cada capítulo contiene muchos fragmentos, situados a partir de una fecha y un lugar o personaje concreto, lo que hace que su lectura sea muy ágil y dinámica”, dice Antonio Vera, responsable editorial del libro del cantautor.
Son más de 300 páginas con historias varias. Vera rememora los entretelones de la canción Palomitay. “Esa hermosa composición que cuenta la historia de dos enamorados que no se pueden reunir porque en Patacamaya una marcha de mineros se dirige hacia La Paz, desafiando a los soldados armados, para protestar frente al decreto 21060 en 1985”.
Así es como Rico ha ido retratando en canciones lo que fue pasando en el país después de la Noche de San Juan. Y en sus textos hay personajes como Filemón Escóbar, Matilde Casazola, Domitila Chungara, Luis Espinal, el Macho Camacho y muchos otros.
El tupiceño recibió ayer en su casa a La Razón y recordó aquella decisión tomada 53 años atrás. Contó que desde entonces se ha dedicado a presentar “la parte cantada de la historia del país”… y ahora, esta noche, presentará sus Testimonios con guitarra.