La Feria del Libro de Fráncfort celebra su regreso y la resiliencia de la edición
Algunas restricciones continúan, como el número diario de visitantes limitado a 25.000, dos veces menos que lo normal, y la exigencia de un pase sanitario.
La Feria del Libro de Fráncfort, el mayor encuentro mundial del sector editorial, celebra esta semana su regreso pospandémico con la presencia de editores del mundo entero, estimulados por la resistencia del libro durante la crisis sanitaria, pero inquietos por la escasez de papel.
La Feria, que el año pasado se llevó a cabo casi integralmente en línea, abre sus puertas del miércoles 20 de octubre al domingo 24 de octubre con la esperanza de retomar la efervescencia que le dio a lo largo de los años su importancia y prestigio.
Sin embargo, algunas restricciones continúan, como el número diario de visitantes limitado a 25.000, dos veces menos que lo normal, y la exigencia de un pase sanitario.
«Todavía no es una Feria del libro normal», advirtió el director del evento, Jürgen Boos, quien en la tarde de este martes presidirá la tradicional ceremonia de apertura.
Pero es la oportunidad para que la industria «se reencuentre» después de 18 meses, agregó.
Durante el período de pandemia, el sector del libro se «comportó muy bien», aseguró. Las restricciones que dejaron a las personas en casa fomentaron la lectura, especialmente entre los jóvenes.
En Estados Unidos, las ventas de libros impresos crecieron más de 8% en 2020, el mayor aumento en 10 años, según el grupo de investigación NPD.
El crecimiento del sector fue impulsado por las obras para adolescentes pero también por textos prácticos para adultos, que buscaron libros de cocina y de arreglos caseros para llenar el tiempo libre.
En Alemania, el mayor mercado de libros en la Unión Europea (UE), las librerías establecieron ventas en línea, logrando aumentar en 20% sus ingresos por internet, que alcanzaron $us 2.640.
También crecieron las ventas de libros digitales y de audio.
Los libros «resultaron ser un apoyo especialmente resistente y popular durante la pandemia», aseguró Boos.
Inquietudes por navidad
Sin embargo, los profesionales del libro, cuyas cifras anuales de negocios se acercan a los $us 103.200, temen que esas cifras sean pasajeras.
Al igual que los sectores automovilístico y de electrodomésticos, las editoriales temen verse golpeadas por la escasez mundial de materias primas que afecta las cadenas de abastecimiento y frena la recuperación económica mundial.
Al acercarse el crucial período de fiestas de fin de año, los editores alertan sobre la escasez de papel y cartón, las trabas en los puertos y la falta de conductores de camión para las entregas.
«Temo que en navidad, la gente no pueda estar segura de obtener rápidamente el libro que desea», declaró Jonathan Beck, director de la célebre editora alemana C.H. Beck, al diario financiero Handelsblatt.
Advirtió también que el precio de los libros podría aumentar.
Canadá, invitado de honor
La cita de Fráncfort es la última muestra del regreso de las ferias profesionales después de 18 meses de paro forzado.
En septiembre, Munich recibió a unos 400.000 visitantes en el salón del automóvil IAA.
Sin embargo, la feria del libro estará marcada por la crisis sanitaria ya que estarán presentes solamente unos 1.500 expositores de más de 70 países.
En 2019, hubo 7.500 expositores de más de 100 países.
Apenas 200 autores acudirán este año a la Feria.
La incertidumbre sobre las restricciones de viaje y las preocupaciones sobre el virus enfriaron a muchas editoriales y escritores de renombre, en especial de Estados Unidos, Asia y América Latina.
Numerosos eventos para los profesionales de la edición, como la venta de derechos o la traducción de obras, serán realizados en línea.
Canadá será el invitado de honor este año, con la presencia de los autores Michel Jean, Michael Crummey y el haitiano-canadiense Dany Laferriere.
Margaret Atwood, principal figura de las letras canadienses con su obra «El cuento de la criada», participará en línea.