Los máximos dirigentes del gigante energético británico Shell fueron demandados el jueves. La demandante oenegé ecologista ClientEarth, denunció su «deficiente» gestión de los riesgos vinculados al cambio climático. Y es que, la semana pasada Shell publicó los beneficios más altos de su historia.
ClientEarth presentó ante la Alta Corte de Londres una demanda en contra el consejo de administración de Shell; «por no haber gestionado los riesgos materiales y previsibles que implicaba para la empresa el cambio climático». Así lo anunció en un comunicado.
La oenegé considera que los 11 miembros del consejo de administración fallaron a sus obligaciones legales. Y es que no adoptaron una estrategia de transición energética; como se quedó en el Acuerdo de París. Esta oenegé actúa en su calidad de accionista minoritario de la petrolera.
El objetivo de este tratado internacional es limitar el calentamiento global por debajo de 2ºC; o preferiblemente 1,5ºC. Todo respecto a los niveles preindustriales. Así había sido adoptado por 196 países en 2015, al término de la COP21.
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Según ClientEarth, es la primera vez que el consejo de administración de una empresa es denunciado por su incapacidad para preparar correctamente la transición energética.
«La transición hacia una economía de bajas emisiones de carbono no es solo inevitable sino que ya está en marcha». «Sin embargo, el consejo de administración persiste en una estrategia (…) deficiente»; que amenaza «el éxito futuro de Shell». Así lo afirmó Paul Benson, abogado de los demandantes.
El grupo refutó las acusaciones, considerando que el procedimiento no tiene «ninguna base». Y afirma que su estrategia climática «está alineada con el objetivo más ambicioso del Acuerdo de París». Esta acción fue aprobada por el 80% de sus accionistas.