La tendencia al calentamiento global se afianza y 2012 cerrará como uno de los años más cálidos desde que comenzaron los registros, con un nuevo récord en el deshielo del Ártico y una variedad de fenómenos que terminaron en desastres en todo el planeta.

Según el informe “Estado Mundial del Clima 2012”, elaborado por la Organización Meteorológica Mundial (OMM) con los resultados de todos los fenómenos extremos ocurridos de enero a octubre, este año figura ya en “el noveno lugar de los más calientes jamás observados desde el inicio de la toma de datos en 1850”.

Para el secretario general de la OMM, Michel Jarraud, ésta evolución anormal del clima continuará, principalmente a causa de los gases de efecto invernadero —fenómeno causante del cambio climático—, cuya concentración en la atmósfera alcanzó igualmente niveles históricos este año.

El cambio climático se puede constatar en todo el planeta y por el retroceso histórico experimentado por la capa de hielo del océano Ártico. Entre marzo y septiembre, la superficie helada perdió 11,83 millones de kilómetros cuadrados y en septiembre llegó a reducirse a la mitad con respecto a la extensión media mínima estacional del periodo 1979-2000.