Icono del sitio La Razón

Atentado contra coptos en Egipto deja 21 muertos

El presidente egipcio, Hosni Mubarak, acusó a «manos extranjeras» de un atentado que dejó 21 muertos y 79 heridos frente a una iglesia copta de Alejandría, a dos meses de las amenazas de Al Qaida contra la comunidad cristiana.

El atentado es «una operación terrorista ajena a nosotros» en la que están implicadas «manos extranjeras», afirmó Mubarak en un discurso retransmitido por la televisión. Se trata de «un acto criminal odioso que apunta contra la nación, coptos y musulmanes», agregó el presidente egipcio, denunciando «la implicación de manos extranjeras» sin ofrecer más precisiones.

La tensión seguía presente este ayer alrededor de la iglesia atacada, cuya fachada estaba manchada de sangre.

Desobedeciendo a los llamados a la calma, jóvenes manifestantes cristianos, repartidos en pequeños grupos, lanzaron piedras y botellas contra las fuerzas antidisturbios, que respondieron con disparos de gases lacrimógenos.

 «El corazón de los coptos está en llamas» o «la sangre de los coptos no es barata», gritaron los manifestantes. El patriarca de la Iglesia copta, Chenuda III, reclamó que los autores del ataque sean rápidamente detenidos y juzgados, calificando el atentado de acto «terrorista» y «cobarde» que busca «desestabilizar el país».

El ataque se produjo durante la noche de Año Nuevo, delante de la iglesia de los Santos (al Qidisin) en Alejandría, la segunda gran ciudad del norte de Egipto, hacia las 12.30 de la noche, cuando los fieles salían del templo.

La hipótesis de un coche bomba, barajada en un principio por las autoridades, fue descartada por el ministerio de Interior, que reveló que la masacre fue «probablemente» perpetrada por un kamikaze.

BOMBA. El explosivo, de fabricación local, contenía trozos de metal «para alcanzar al mayor número» de personas posible, según el ministerio. Las circunstancias de la explosión, «vistos los métodos que predominan actualmente las actividades terroristas a nivel mundial y regional, indican claramente que elementos exteriores planificaron la puesta en escena» del atentado.

Esta manera de hablar parece referirse a los métodos empleados por Al Qaida, especialmente en Irak.

Los coptos de Egipto suelen envolverse en actos de violencia interconfesional, pero hasta ayer nunca habían tomado forma de atentado suicida.