El jefe del Gobierno italiano, Silvio Berlusconi, cuyo nombre sale a relucir en un nuevo escándalo sexual en el que está implicada una menor marroquí, declaró abiertamente que «ama la vida y las mujeres».
«Soy una persona feliz, amo la vida y amo las mujeres», declaró el dirigente, de 74 años, a los periodistas italianos que le interrogaban en Bruselas, tras finalizar el Consejo Europeo, sobre el nuevo escándalo que sacude a la política italiana.
La prensa transalpina informa sobre el asunto que implica a una joven marroquí, llamada Ruby, quien, buscando iniciar una carrera en el espectáculo, habría participado en fiestas de contenido sexual. Detenida por la Policía tras ser acusada de robo, Ruby habría reconocido su participación en fiestas celebradas en Arcore, la residencia de Berlusconi cerca de Milán, al norte.
«Nadie podrá cambiar mi estilo de vida, estoy orgulloso de él. Llevo una vida terrible, avanzo haciendo esfuerzos sobrehumanos, trabajando hasta las dos y media de la madrugada. Después me acuesto y me levanto a las siete de la mañana. Y si, de vez en cuando, necesito una fiesta para distraerme, nadie me hará cambiar de estilo de vida», agregó.
«Les deseo la misma serenidad con la que me miro al espejo», espetó Berlusconi. «Yo no he influido en nadie (para liberarla). Como ella me contó que había tenido una vida difícil, la ayudé. Pero no le he regalado nada, tampoco coches, como dice la prensa», se defendió.