El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, reelecto en las urnas, reiteró ayer su ofrecimiento de “unidad nacional” a la oposición, que —liderada por Henrique Capriles— salió fortalecida de unos comicios en los que casi la mitad del país votó contra el proyecto oficialista.

Chávez, desde 1999 en el poder, se impuso el domingo a Capriles por más de diez puntos, 55,14% a 44,24%, y una diferencia de 1,5 millones de votos, según el Consejo Nacional Electoral, con el 96,93% de las papeletas contabilizadas. Este lunes, ambos líderes sostuvieron una conversación telefónica, que fue catalogada de “amena” por Chávez y tras la cual el Presidente reiteró el llamado a la “unidad nacional” que ya había hecho en su discurso de la víspera.

“Créanmelo: he sostenido una amena conversación telefónica con Henrique Capriles. ¡Invito a la Unidad Nacional, respetando nuestras diferencias!”, publicó Chávez en Twitter. Durante la campaña, sin embargo, fue muy duro con Capriles, a quien llamó “majunche” (poca cosa), “burgués” o hasta “la nada”. “Recibí llamada del Pdte Chávez. En nombre de+6.500.000 venezolanos hice un llamado a la unidad del país y el respeto a todos”, respondió Capriles.

Posturas. El diario opositor Tal Cual editorializó en su edición de ayer que el presidente Chávez “no puede olvidar que tiene frente a sí y contra él a la mitad del país. Venezuela está desgraciadamente partida en dos mitades. Un país así no puede prosperar”.

Ayer, la televisión oficial difundía constantemente imágenes de la victoria de Chávez al son de una música festiva y triunfal, mientras en el este de Caracas, bastión de la oposición, las calles lucían de-siertas, como un día feriado.

La victoria del Mandatario, cuya imagen se había visto debilitada en los últimos meses por un cáncer del que asegura haberse curado, reafirma que sigue contando con gran apoyo popular, especialmente entre los pobres, que acudieron en masa a votar.

Pero la oposición, que en las últimas presidenciales de 2006 fue barrida por 25 puntos por el gobernante, dio un salto incuestionable de la mano de Capriles, de 40 años, 18 menos que Chávez. Capriles, elegido candidato en unas inéditas primarias en un proceso que consolidó la unidad opositora, prometió el domingo que no dejará solos a los más de seis millones de venezolanos que votaron por él. “Hay una oposición más consolidada, con un liderazgo claro y con muchas opciones para el futuro”, dijo el presidente de la firma Datanálisis, Luis Vicente León. “Ahora Chávez tiene un líder en la oposición que puede capitalizar la unidad” de sus detractores, dijo.

Hugo Chávez responde a los saludos

Países

El presidente  Hugo Chávez agradeció ayer las felicitaciones de varios líderes del mundo por su reelección en Venezuela en los comicios del domingo.

Twitter

“Gracias a los amigos y amigas del mundo por sus palabras y sus sentimientos de amor hacia Venezuela. ¡¡¡Gracias!!!», escribió el gobernante en su cuenta oficial @chavezcandanga. AFP

Economía, seguridad y su salud son retos de Chávez

Analistas estiman que el presidente Hugo Chávez debería enfocarse en su próxima gestión a la resolución de problemas concretos como la economía, la seguridad y su salud. En lo que se refiere a su gestión ejecutiva, “el principal desafío de Chávez será el de ocuparse de problemas concretos como el crimen, el alto costo de vida y deficiencias en infraestructura”, dijo a La tercera el politólogo José Vicente Carrasquero. Una opinión similar expresó el consultor Christian Burgazzi, quien remarcó que “los mismos problemas de hace años ahora están acrecentados y empeorados”.

“A pesar de las ingentes cantidades de dinero, los desequilibrios son grandes: fiscales, cambiarios, inflacionarios, de balanza de pagos, todo se importa y solo se exporta petróleo, desempleo, pobreza, baja productividad, servicios ineficientes y falta de viviendas, entre otros”, precisó.

Más allá de eso aún se mantiene la sombra sobre la fortaleza de la salud de Chávez, después del cáncer que le fue detectado en 2011 y por el cual se ha sometido a operaciones y tratamientos, dicen los expertos.

Gobiernos saludan victoria oficialista

Cristina Fernández: Presidenta de Argentina

“Nuestros gobiernos se comprometieron a seguir trabajando para lograr que el Mercosur y la Unasur se consoliden entre los principales bloques político-económico mundiales”.

Mariano Rajoy: Jefe del Ejecutivo Español

Deseamos intensificar las relaciones bilaterales “en un espíritu de diálogo constructivo. Nuestros dos países están unidos por vínculos de todo tipo, en particular los humanos”.

Hong Lei: Portavoz de la Cancillería de China

“China desea que Venezuela consiga nuevos logros en el desarrollo del país bajo el liderazgo del presidente Chávez. Estamos listos para continuar trabajando con Venezuela”.

Rafael Correa: Presidente de Ecuador

“Adelante, compa Chávez. Toda Latinoamérica está contigo y con Venezuela, ¡cuna del Libertador! Próxima batalla: ¡¡¡Ecuador!!! A prepararnos para una victoria aún mejor en febrero”.

Juan Manuel Santos: Mandatario de Colombia

“Para Colombia siempre será una prioridad trabajar con Venezuela en el mantenimiento y fortalecimiento de las relaciones bilaterales. Son muchos los temas que tenemos por delante”.

José Félix Fernández Estigarribia: Canciller de Paraguay

“Tal vez ahora el gobierno de Chávez evalúe que se está equivocando con Paraguay”. Este “podría ser el punto de partida para el mejoramiento de las relaciones con Paraguay”.

Revés pone a prueba unidad de la oposición

La frustración de la derrota pone en peligro hasta la propia unión de los opositores en Venezuela. Esta unidad será puesta a prueba en las elecciones a la Gobernación en varios estados y alcaldías previstas para diciembre, señalan analistas.

La oposición, unida por primera vez bajo el rótulo de Mesa de la Unidad Democrática (MUD), había encontrado al fin un líder con identidad popular, Henrique Capriles, y cuya juventud le hacía inmune a cualquier ataque por complicidad con el viejo sistema político que colapsó en 1998, sin embargo, éste perdió. Algunos analistas creen que dentro del bloque algunos partidos pedirán explicaciones a los otros por el fracaso electoral del domingo.

En concreto, no entienden cómo se perdió en el estado de Zulia, territorio opositor. El chavismo pudo haber ejercido coacciones sobre los votantes o contar con un inmenso voto cautivo ganado con los subsidios, pero eso no explica su victoria. Además, Capriles sólo venció en dos de los 24 estados que forman la República de Venezuela (Táchira y Miranda).

No obstante, mantener la MUD parece la única garantía de lograr un resultado que sirva de consuelo y consolidación del proyecto político opositor, que pese a perder, obtuvo 6,38 millones de votos, el 44,5%, a diez puntos de Chávez (la distancia más corta lograda hasta ahora en las elecciones celebradas en estos 14 años), que suponen casi dos millones más que los obtenidos en 2006.

La oposición debe buscar en sus filas las razones de la derrota, desde el fracaso para movilizar la simpatía espontánea que despertó hasta su relación con un pasado que aún hoy sigue, para los venezolanos, asociado a la corrupción de las élites. Pasando por una visión de país en la que los excluidos no llegan a tener relevancia.