El ministro de Defensa de Colombia, Rodrigo Rivera, descartó ayer totalmente cualquier posibilidad de dialogar con las FARC y, por el contrario, instó a no bajar la guardia frente a las acciones terroristas de esa guerrilla. «Ellos no creen en la dejación de las armas y por eso hay que arreciar. Con terroristas no hay ninguna posibilidad de dialogar como tampoco con personas que creen que pueden utilizar la violencia y el terror para hacer entender al interlocutor», dijo Rivera.

«Colombia no cederá nunca ante esa clase de chantajes (…) y vamos a derrotar» a los terroristas, añadió. Rivera aludió al ataque perpetrado por las FARC el pasado miércoles en una carretera del selvático y sureño Caquetá en el que murieron 14 policías y nueve más resultaron heridos.