Con Europa sumida en una crisis que no da tregua, un tercio de los  456 mil millones de dólares que el FMI logró reunir para su cortafuegos anticrisis viene de naciones emergentes. Esta participación crecerá.  Entre estas naciones, el mayor contribuyente a este fondo conjunto que permitirá dar créditos a naciones en problemas, es China, que precisó su aporte: 43 mil millones de dólares.

Brasil, Rusia e India comprometieron 10 mil millones de dólares, y Sudáfrica, que con China completa el grupo BRICS, 2.000 millones.  También aportaron emergentes como Corea del Sur (15 mil millones de dólares), México (10 mil millones de dólares), Turquía (5.000 millones) y Colombia (1.500 millones).

Condiciones. “Países grandes y pequeños se unieron a nuestro llamado a actuar, y otros podrían sumarse. Les saludo y elogio su compromiso con el multilateralismo”, dijo en un comunicado la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, quien hizo campaña por esta iniciativa.

Para el FMI, estos aportes de naciones que no han alcanzado el desarrollo económico de sus pares europeos y de EEUU, quienes gobiernan el Fondo, tendrá una contrapartida ya anunciada: un incremento de la presión para que cambie la distribución del poder de voto en el organismo, tal como fue acordado en 2010.

Los portavoces de esta cruzada, las naciones del BRICS, ya anunciaron que sus compromisos están supeditados a que el FMI se reforme.  Por sobre todo, exigen que “las reformas de cuotas sean cumplidas (…), que sean llevadas a cabo”, según resumió el ministro brasileño de Hacienda, Guido Mantega. “Hay un atraso por parte del Fondo Monetario y algunos países europeos en la concreción del acuerdo” de 2010, concluyó.

En noviembre de 2010, el FMI aprobó una reforma que aumentaría el poder de voto de varios países que hicieron aportes adicionales sobre su capital en el Fondo. Entre ellos figuran Brasil, Rusia, India y China.

Sin embargo, los cambios no fueron puestos en práctica porque requieren la aprobación de los parlamentos de varios países, un proceso lento y que se enfrenta a coyunturas políticas particulares de los socios.

Los accionistas del Fondo se distribuyen el poder de voto en función de la parte del capital del organismo financiero que poseen. Las naciones emergentes sostienen que el FMI debería reflejar mejor la nueva realidad económica mundial, en la que las economías emergentes se constituyeron en las más dinámicas del planeta.

Estados Unidos, el país con mayor poder de voto en el Fondo, decidió no contribuir al cortafuegos, y hasta el momento la Casa Blanca no ha mostrado gran voluntad de impulsar la reforma del FMI en el Congreso.

Japón, el principal aportante individual, volcará unos 60 mil millones.    El cortafuegos aumentará de manera importante la capacidad de respuesta del FMI, y en plena crisis en Europa, países como China han venido insistiendo en que el dinero no sea destinado solamente a contener la crisis que galopa por el viejo continente.

Comercio y crisis de la Eurozona

El presidente mexicano, Felipe Calderón, clausuró ayer en Los Cabos (Baja California) la cumbre del G20 (Grupo de los 20 países industriales más emergentes) con un plan de acción para el crecimiento centrado en la Eurozona y una moratoria hasta 2014 del compromiso de no aplicar medidas comerciales proteccionistas.

Cruce entre Argentina y Reino Unido

Cuando el primer ministro conservador británico, David Cameron, se acercó a Cristina Fernández para agradecer el apoyo económico, la Presidenta argentina le ofreció un sobre que contenía las 40 resoluciones de la ONU sobre Malvinas. El premier lo rechazó. El canciller argentino, Héctor Timerman declaró que “Cameron no entiende qué es el colonialismo”.