Al clausurar el encuentro, el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, anunció oficialmente, con el asentimiento de los 120 países reunidos, que la próxima Cumbre será en Venezuela en 2015.

El canciller venezolano, Nicolás Maduro, agradeció el anuncio del Presidente iraní después de haber señalado que “los esperamos en 2015 en Venezuela, en la Cumbre que estará presidida por Hugo Chávez”, con lo que dio por hecha la reelección del actual gobernante en los comicios presidenciales del 7 de octubre.

La Cumbre aprobó el Documento Final, un amplio texto con casi 700 artículos, en el que destacan la exigencia de un Estado palestino con fronteras seguras y el desarme nuclear global. Además, los 120 países en desarrollo del grupo reclaman la reforma de la ONU, ya que todos los No Alineados están de acuerdo en que precisa una democratización que permita a los estados más débiles defender sus derechos.

Hasta que hoy las delegaciones acaben de abandonar Irán tras la Cumbre, se mantendrán las estrictas medidas de seguridad, con calles parcialmente cortadas y numerosos controles, y permanecerán cerrados al tráfico nacional los aeropuertos de la capital iraní.

En el encuentro, el conflicto de Siria fue el principal motivo de polémica, donde el respaldo de Irán al régimen de Damasco se vio cuestionado por Catar, Arabia Saudí y Egipto, cuyo presidente, Mohamed Mursi, dijo que su par sirio, Bachar al Asad, perdió legitimidad.

Siria. En la apertura de la Cumbre, en la que Egipto entregó la presidencia de los No Alineados a Irán para los siguientes tres años, Mursi, el primer presidente egipcio que visitó Teherán en décadas, pidió a la oposición siria que se una contra un régimen opresivo.

Ayer, antes de dejar Irán, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, solicitó a “todas las partes que acaben con cualquier forma de violencia” en Siria e instó al Gobierno de Damasco a dejar de utilizar armas pesadas. Asimismo, aludió a las amenazas de Israel y EEUU de atacar Irán por su programa nuclear y pidió que “se baje el tono para evitar provocaciones”, pues consideró que es “el momento de más razón y más responsabilidad para resolver las diferencias por medios pacíficos”.

En la sesión de apertura de la reunión, Ban, cuya visita a Irán fue muy criticada por EEUU e Israel, se enfrentó a las autoridades iraníes y les pidió que cumplan las resoluciones de la ONU sobre su programa nuclear y cooperen plenamente con el Organismo Internacional de la Energía Atómica.

Previamente, en el discurso de apertura de la reunión, el líder supremo iraní, ayatolá Ali Jamenei, calificó de “pecado imperdonable” el uso de bombas atómicas y dijo que Irán nunca las fabricaría. No obstante, aseguró que Teherán tampoco renunciará al derecho a desarrollar un programa nuclear con fines pacíficos.

ONU aboga por presos

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, pidió al régimen iraní poner en libertad a centenares de presos políticos. “He insistido que dejen en libertad a los dirigentes de la oposición, a los defensores de derechos humanos, a los periodistas, a los militantes sociales”, dijo. AFP