Estados Unidos liberó a decenas de presos de alto riesgo de la cárcel de Guantánamo y aplazó por años la libertad de más 150 hombres inocentes, según archivos militares filtrados por el portal WikiLeaks y divulgados el domingo por periódicos europeos y estadounidenses, entre ellos El País.

Los 779 documentos, que forman parte de un archivo de memorandos secretos filtrados el año pasado por WikiLeks, fueron entregados a un grupo de medios estadounidenses y europeos, incluidos The New York Times, The Daily Telegraph, El País, Le Monde, Der Spiegel y La Repubblica.

El «tesoro» divulgado por el sitio, dedicado a hacer públicos documentos secretos estadounidenses, puso en evidencia que los funcionarios norteamericanos tenían que lidiar a menudo con evidencias poco sólidas y una gran confusión acerca de la culpabilidad o la inocencia de los detenidos en la prisión de la base naval estadounidense de la isla de Cuba, informaron medios de prensa este lunes.

Miles de las páginas revelan que 130 de los 172 prisioneros que dejaron la base naval de Guantánamo era considerados «de alto riesgo» y de amenaza para Estados Unidos y sus aliados.   Sin embargo, fueron liberados sin haber sido rehabilitados o sin la supervisión necesaria, según AFP.

Incluso un tercio de los 600 detenidos bajo la era de George W. Bush, varios de los cuales fueron transferidos a terceros países, también eran catalogados como de «alto riesgo» antes de que fueran puesto en libertad o entregados a otros gobiernos, reveló Times.

Según el material de El País, Guantánamo creó un sistema policial y penal sin garantías en el que solo importaban dos cuestiones: cuánta información se obtendría de los presos, aunque fueran inocentes, y si podían ser peligrosos en el futuro.

Ancianos con demencia senil, adolescentes, enfermos psiquiátricos graves y maestros de escuela o granjeros sin ningún vínculo con la yihad fueron conducidos al presidio y mezclados con verdaderos terroristas como los responsables del 11 de septiembnre.

Toda la información está recogida en 4.759 folios firmados por los más altos mandos de la Fuerza Conjunta de la base y dirigidas al Comando Sur del Departamento de Defensa en Miami.

En lo que podría convertirse en un problema para Estados Unidos y los aliados que intentan sacar del poder al presidente libio Muamar Gadafi, los archivos señalan que uno de los entrenadores de los rebeldes libios tiene vínculos más estrechos con Al Qaeda de los que se pensaba, según El País.

Abu Sufian bin Qumu se dedicó por dos décadas a actividades extremistas antes de que se entrenara en dos campos de Al Qaeda. El hombre participó en lucha de los talibán contra la Unión Soviética y la Alianza Norte, y fue conductor de Osama bien Laden en Sudán, según la radio publica estadounidense.

Por seis años estuvo detenido en Guantánamo antes de Estados Unidos lo entregara a las autoridades de Libia en 2007 por pedido de Gadafi, agregó el reporte. Las autoridades libias lo dejaron en libertad el verano pasado.

Asimismo, los informes revelan que al menos 150 de los detenidos eran afganos o paquistaníes inocentes, incluidos chóferes, agricultores y cocineros, que fueron detenidos en el marco de operaciones frenéticas de inteligencia en zonas de guerra.

 Sin embargo, estuvieron durante años detenidos debido a la confusión de identidad o simplemente porque estaban en el lugar en el momento equivocado, según los medios estadounidenses.