El presidente estadounidense Barack Obama declaró el fin de las operaciones de combate de EEUU en Irak y dejó entreabierta la posibilidad de que la retirada de Afganistán, prevista para el año que viene, se retrase.

Pocas horas antes, el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, aseguraba a su pueblo que Irak «es un país soberano e independiente» en un discurso retransmitido vía cadena televisiva a todo el país. «Esta noche (martes) les anuncio que la misión de combate estadounidense en Irak terminó», dijo Obama desde la Oficina Oval en la Casa Blanca.

EEUU, que envió más de un millón de militares al país árabe desde la invasión de marzo del 2003 y perdió más de 4.400 vidas en el conflicto, «pagó un alto precio» por ese conflicto, recordó el Presidente. Pero el Ejército estuvo «a la altura de sus responsabilidades», según el Mandatario, quien se declaró «impresionado» por el «sacrificio» de las tropas.

Ahora corresponde al Gobierno y al pueblo iraquí asumir su parte, según Obama, quien envió a su vicepresidente Joe Biden a Bagdad para pedir a los líderes que aceleren la creación de un gobierno. Cinco meses después de las elecciones, Irak no cuenta aún con un Ejecutivo, y en la actualidad se vive un rebrote de la violencia.

Al referirse a Afganistán, Obama dijo: «El ritmo de la reducción de nuestras tropas será determinado por las condiciones sobre el terreno». El Mandatario había dicho en diciembre, cuando anunció un aumento del despliegue de tropas en ese país, que la retirada se iniciaría en julio del 2011.

Histórico. En Bagdad, Maliki insistió en el momento histórico del fin de las operaciones militares estadounidenses, que se iniciaron el 2003 para hallar unas armas de destrucción masiva que nunca aparecieron. Al menos 106.000 civiles perdieron la vida de acuerdo al portal en internet www.iraqbodycount.org. La guerra que inició el ex presidente George W. Bush (2001-2009) supuso, también, el fin de la dictadura de Sadam Husein.

Obama evita clamar victoria en el Golfo

«Esta noche anuncio que la misión de combate en Irak ha terminado. La operación Libertad Iraquí ha acabado y el pueblo de Irak tiene ahora la responsabilidad principal de mantener la seguridad de su país».

De ese modo, Barack Obama, dio por concluida la guerra de Irak, siete años y cinco meses después de su comienzo, en un discurso televisado a la nación desde la Casa Blanca. El Presidente de EEUU, sin embargo, ha evitado clamar victoria, porque según ha dicho, a la joven democracia iraquí le quedan por delante grandes retos.

Seis meses después de las elecciones parlamentarias, Bagdad aún no tiene un nuevo Gobierno. Cada mes muere, en ataques terroristas, una media de 250 civiles. «Por supuesto, la violencia no acabará con nuestra misión de combate. Los extremistas seguirán colocando bombas, atacando a civiles y tratando de alentar la violencia sectaria», aseguró anoche Obama. «Cuando se forme Gobierno, no debe caber duda: el pueblo iraquí tendrá un fuerte aliado en Estados Unidos… Nuestro compromiso con el futuro de Irak no ha acabado». Quedan en Irak ya 50.000 soldados.