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El minero boliviano no tiene trabajo permanente

El boliviano Carlos Mamani, el único extranjero de los 33 sobrevivientes del deslizamiento de la mina San José en la ciudad chilena de Copiapó, aún no consigue trabajo tras el rescate de octubre del año pasado.

Los 33 mineros recordaron ayer el primer año del derrumbe en la mina San José, que los mantuvo durante 69 días a 700 metros bajo la superficie hasta que fueron rescatados el 13 de octubre.

Una semana después, Mamani retornó al país donde el mandatario Evo Morales le ofreció el trabajo de jefe de transportes en Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, en Cochabamba, con un sueldo de 7.000 bolivianos. Además de una casa.

En principio, se anunció que Mamani aceptó la oferta presidencial; pero después el minero optó por volver a la ciudad chilena.

Según reseña AFP, Mamani en la actualidad no tiene trabajo y vive en las misma situaciones precarias de antes del accidente. La mayoría de los 33 mineros que protagonizaron una historia de supervivencia que conmovió al mundo no logran superar la experiencia que vivieron bajo tierra ni la fama que los esperaba afuera.

Algunos se dedicaron a las charlas motivacionales y otros han regresado a la minería, pero la gran mayoría se ha dedicado a modestas actividades acá y allá sin empleos fijos. Una vez fuera de la mina, la atención mediática se centró en este grupo de hombres.