El presidente de Bolivia, Evo Morales, pidió al mandatario de EEUU, Barack Obama, que recuerde sus orígenes y frene la, a su juicio, «injusta» Ley de Arizona. El gobernante leyó una carta en la cual le recuerda a Obama que proviene «de un pueblo históricamente discriminado».

«Como defensor de políticas sociales, no debe olvidar usted el origen migrante de sus padres y hacer esfuerzos para impedir que continúe en vigor en el estado de Arizona la injusta y más dura ley migratoria de los EEUU», señala la carta que Morales piensa enviar a Barack Obama.

Agrega que los padres de Obama «tuvieron que iniciar una vida en un país que no era de ellos, pero que los acogió y otorgó una serie de oportunidades para su desarrollo y progreso». Le recuerda que proviene «de una madre europea y un padre africano».

«No sé qué pensaría su padre, que fue inmigrante, si sintiera que ahora no podría vivir ni trabajar en Estados Unidos», sostiene Morales.

La polémica norma, que entró en vigor parcialmente a fines de julio, pues una jueza federal logró bloquear los artículos más criticados, penaliza la presencia de indocumentados en el estado de Arizona.

En su carta a Obama, Morales lamenta que esa norma pretenda «revivir en pleno siglo XXI una suerte de apartheid, de discriminación política, económica, cultural, social y racial contra hermanos latinoamericanos».

También señala que tanto la Ley de Arizona como la directiva de retorno voluntario de la Unión Europea (UE) pondrán «en una situación difícil a millones de seres humanos» que han migrado. En la carta, Morales insiste en que Obama «no puede permitir que el racismo se mantenga en su país» y concluye diciéndole que «está en sus manos» evitar que retornen a EEUU «los oscuros días de persecución por el color de la piel y el origen racial».

Tras leer la carta, el Mandatario expresó su confianza en que su colega estadounidense escuchará su pedido y anticipó que, a partir de ese pronunciamiento emitido ayer, ratificará esta posición en todos los eventos internacionales a los que asista.

Entre tanto, en EEUU el Departamento de Justicia de EEUU advirtió a la oficina del alguacil del condado de Maricopa, en Arizona, Joe Arpaio, que puede ser demandada por no cooperar en una investigación sobre presuntas violaciones de derechos civiles y supuestas prácticas discriminatorias por origen y nacionalidad.

El fiscal general adjunto, Thomas E. Pérez, envió una carta a la oficina en Phoenix de Arpaio, conocido por sus políticas antiinmigrantes, en la que le da plazo hasta el 17 de agosto para cooperar con el Departamento de Justicia para evitar ser demandada por el Gobierno federal.

«En ausencia de la cooperación voluntaria por parte de MCSO (Maricopa County Sherrif’s Office) con la investigación, dentro de dos semanas, el Departamento registrará una demanda civil para lograr acceso a los documentos requeridos», señala.

De acuerdo con la carta, la División de Derechos Civiles del Departamento de Justicia notificó el 10 de marzo del 2009 a la oficina de Arpaio que estaba siendo investigada por presuntas violaciones a las leyes.

Comandante y presidente

En la misma conferencia el Presidente afirmó que para él Fidel Castro sigue siendo «comandante y presidente» de Cuba, al destacar las críticas que hace el líder cubano al «intervencionismo» del «imperialismo norteamericano».