“Los Cinco” son un grupo de tres cubanos y dos cubanos nacionalizados estadounidenses a los que EEUU acusa de recopilar información acerca de futuros actos terroristas contra Cuba, país que los considera héroes nacionales.
El grupo fue detenido en 1998 y juzgado en 2001 por cargos de conspiración para actuar como agentes de Cuba no inscritos oficialmente, fraude y uso indebido de documentos de identidad, y conspiración para transmitir información sobre defensa nacional. Fernando González fue sentenciado a 18 años de prisión; Gerardo Hernández (líder del grupo), a dos cadenas perpetuas; Ramón Labaniño, a una cadena perpetua; Antonio Guerrero, a 22 años; y René González, a 13 años, en un proceso que el Gobierno cubano calificó como “ilegal”.
— ¿Cuáles son las condiciones de encierro del grupo?
— Desde que Gerardo y sus compañeros fueron detenidos, la tortura psicológica siempre ha estado presente. Antes de comenzar el juicio fueron sometidos a confinamiento solitario durante más de 17 meses y se les amenazó con la pena de muerte. Ya, luego de su encarcelamiento, no se les permitió tener comunicación estable y, teniendo un comportamiento intachable, fueron llevados a celdas de castigo. Además, en muchos momentos se les ha suspendido importantes visitas consulares.
A Fernando, Ramón y Antonio los pueden visitar, a la esposa de René y a mí nos restringieron hasta la visa para entrar al país. Gerardo y yo llevamos 24 años de casados, pero no nos hemos visto en los últimos 14 años y nuestros planes de vida, como el de tener hijos, han quedado truncados.
— ¿Se ha logrado algún avance en la parte legal para la liberación de “Los Cinco”?
— En este momento estamos envueltos en un proceso de hábeas corpus que se ha presentado porque hay nueva evidencia sobre el pago que realizó el Gobierno de EEUU a un grupo de periodistas que estuvo informando sobre el caso antes, durante y después del juicio. Todo con el objetivo de que el proceso judicial en Miami se de en un ambiente amañado y para lograr una decisión parcializada.
Sin embargo, desde el punto de vista legal, no creemos que hayan muchas posibilidades, ya han transcurrido 14 años de apelaciones para estas sentencias tan desmesuradas y no hemos obtenido ninguna decisión favorable.
Consideramos que con el hábeas corpus hemos agotado todos los recursos judiciales. En caso de que la decisión del juez no sea favorable, no nos queda otro camino que continuar las gestiones públicas y privadas para que, a través de la presión de la opinión pública internacional, el presidente (Barack) Obama les otorgue finalmente a “Los Cinco” su libertad.
— ¿Se llevará el caso ante un tribunal internacional?
— Se puede hacer siempre que se hayan agotado todos los recursos legales en el país, pero la Justicia de Miami está diseñada para que los alegatos se presenten de forma indefinida. Además, las cortes internacionales no emiten un veredicto inmediato y sabiendo que EEUU hace caso omiso al llamado de cualquier instancia internacional que no esté subordinada a sus intereses, tomaría mucho más tiempo buscar una solución. Por eso estamos buscando una alternativa humanitaria. En 14 años, “Los Cinco” ya cumplieron las penas por las que sí fueron hallados culpables y ya es momento de su liberación.
— ¿Qué tipo de apoyo han recibido en estos últimos años?
— Parlamentarios de todo el mundo, expresidentes, presidentes, organizaciones religiosas y Amnistía Internacional apoyan nuestra causa y han instado al Gobierno de EEUU a dar solución a este tema. Mientras, esta solución humanitaria no se dé, los familiares seguiremos siendo las voces de “Los Cinco”, para denunciar las violaciones legales y de derechos humanos que ellos han sufrido desde 1998.
Pérez: EEUU oculta su política de doble moral
Adriana Pérez, esposa de uno de los cubanos presos en EEUU por una presunta conspiración para transmitir información de defensa de ese país, denunció que el Gobierno estadounidense aplica una política de doble moral en la lucha contra el terrorismo, debido a que, mientras encarcela a hombres que luchan contra este tipo de violencia política, continúa amparando a organizaciones subversivas.
“Hoy, el mundo no conoce el verdadero trabajo que ‘Los Cinco’ hacían. El pueblo de Estados Unidos no conoce por qué Cuba tuvo que sacrificar la vida de estos hombres y es que, sencillamente, a sus gobiernos no les ha convenido que su pueblo conozca la política de doble moral que han llevado. En EEUU hay organizaciones terroristas que se forman, que se organizan, que se financian con el amparo de las diferentes administraciones”, sostuvo Pérez.
“Los Cinco” fueron detenidos en 1998 y en 2001 recibieron largas condenas. La Habana los considera héroes antiterroristas y mantiene una campaña internacional para conseguir su libertad. Reconoce que eran sus agentes, pero asegura que no espiaban a EEUU.
“Aunque Cuba le proporcionó a ese país información sobre grupos terroristas para enfrentar este peligro con acciones conjuntas, los gobiernos de turno, como el de (Bill) Clinton nunca frenaron el trabajo de esas organizaciones. Sólo detuvieron a ‘Los Cinco”, porque encontraron información que vinculaba a EEUU con grupos subversivos, dijo Pérez.