El FBI reveló las primeras imágenes de metales retorcidos de la olla a presión que habría sido utilizada en el doble atentado del maratón de Boston, y concentraba sus esfuerzos en esa pista para hallar a los autores de las explosiones que dejaron tres muertos.

Cerca de 100 de los 183 hospitalizados inicialmente ya fueron dados de alta, aunque aún hay 17 en estado crítico. Según CNN, al menos 13 personas sufrieron una amputación a raíz de las heridas recibidas por las dos bombas caseras que explotaron con 13 segundos de intervalo a una distancia de unos 100 metros cerca de la línea de llegada de la maratón.

Las bombas preparadas con ollas a presión y que estallaron cerca de la línea de llegada de la maratón contenían clavos y trozos de metal, lo que provocó heridas de mucha gravedad en miembros inferiores, con personas que perdieron una o sus dos piernas de manera inmediata.

Otros medios informaron que la Policía de Boston había realizado la primera detención relacionada con el caso, pero las autoridades desmintieron inmediatamente estas versiones. Horas después y sin brindar mayor detalle, se evacuó brevemente la sede del tribunal federal de Boston y el Brigham and Women’s Hospital, donde fueron internadas varias víctimas del atentado.