Las protestas sociales contra las políticas de austeridad alcanzaron ayer una dimensión sin precedentes en los países de la Unión Europea (UE) desde el inicio de la crisis, pero los Gobiernos y las instituciones comunitarias insisten en que no hay alternativas a dicha estrategia económica.

La “jornada de acción” convocada ayer por la Confederación de Sindicatos Europeos (CES) fue la primera en hacer coincidir dos huelgas generales en sendos Estados miembros, España y Portugal, con paros parciales en Grecia e Italia y manifestaciones, huelgas sectoriales y otras acciones en prácticamente toda la zona euro.

En los tres anteriores llamamientos a escala comunitaria (mayo de 2009, septiembre de 2010 y febrero de 2012) los sindicatos europeos coordinaron manifestaciones y protestas masivas en diversas ciudades del continente, pero no lograron un nivel de movilización como el de ayer, que incluyó acciones en 23 países. La intensidad de las acciones fue mayor en los países más afectados por la crisis económica, con los que las organizaciones sindicales del resto de la UE quisieron mostrar su solidaridad.

Las protestas más violentas se registraron en España, donde al menos 118 personas fueron arrestadas y 74 resultaron heridas durante enfrentamientos con las fuerzas del orden.  La jornada de acción “ha sido un gran éxito para los sindicatos europeos, porque todos los países se han implicado de un modo u otro bajo nuestro lema contra la austeridad, por el empleo y por un crecimiento sostenible”, dijo a los medios la secretaria general de la CES, Bernardette Ségol.

“Necesitamos una gobernanza económica diferente, que no se concentre únicamente en la presión salarial y en recortes de la protección social”, añadió la líder sindical, quien expuso esta postura al comisario europeo de Empleo y Asuntos Sociales, László Andor.

Posición. Ante las protestas, instituciones y gobiernos de la UE subrayaron su sensibilidad hacia las preocupaciones de los ciudadanos e hicieron hincapié en que la austeridad es indispensable para superar la crisis.

“Somos muy conscientes de las diferentes protestas que se desarrollan y sabemos que esto es una indicación del alto precio pagado como resultado de la crisis”, dijo la portavoz de la Comisión Europea (CE), Pia Ahrenkilde. La CE sabe que estos “son tiempos difíciles para la gente” y en especial, para todos los parados en Europa, que “están sufriendo mucho por la crisis”.

Para el comisario europeo de Empleo y Asuntos Sociales, muchos de los problemas actuales de la UE no están causados por “la obsesión con la austeridad”, si no por “los defectos de nuestra unión monetaria”. El ministro español de Economía, Luis de Guindos, dijo que el Gobierno respeta el derecho a la huelga, aunque señaló que estas acciones no son el camino adecuado para reducir la incertidumbre que afecta al país.

La canciller alemana, Ángela Merkel, también expresó su respeto al derecho a la huelga, y recalcó la obligación de los gobiernos de “hacer lo debido” para atajar la persistente crisis de la deuda en la zona euro. Esto implica aplicar “duras medidas y recortes” al gasto público, sostuvo.

España, con deuda en 2014

España “no necesita otras medidas” para cumplir con sus metas fiscales en 2012 y 2013, ya que su plan de reformas “es efectivo”, dijo la Comisión Europea, pero advirtió que las anunciadas para corregir el déficit en 2014 “son insuficientes”. AFP