Nicolas Sarkozy, un dirigente que crece en los grandes de-safíos y naufraga en los asuntos domésticos, va camino de liderar la coalición internacional formada para derrocar a Muamar Gadafi. Francia ha jugado un papel clave a la hora de impulsar la intervención militar en Libia y tendrá una misión igual de importante en la planificación y  ejecución de aquélla.

Una prueba: el Elíseo acogerá hoy una Cumbre, organizada en un solo día y que resultará «clave» a la hora de determinar el ataque, en palabras del ministro de Asuntos Exteriores francés, Alain Juppé. «Todo está preparado», aseguró la autoridad.

«Pero la reunión de mañana (hoy) será el lugar para analizar las declaraciones del alto el fuego de Trípoli y sacar conclusiones». Y concluyó: «Lo repito: todo está preparado. Pero ahora mismo no puedo dar un calendario concreto».

Esta madrugada, el embajador francés en la ONU insistió en la inminencia del ataque y aseguró que posiblemente se pondría en marcha tras la cumbre de París.

Entre otros, a esta reunión asistirá el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon; la alta representante de la UE para Asuntos Exteriores, Catherine Ashton; el presidente permanente de la UE, Herman Van Rompuy, así como representantes de la Liga Árabe y de la Unión Africana, y jefes de Estado como el español José Luis Rodríguez Zapatero o la alemana Angela Merkel.