La oposición siria protagonizó hoy nuevas protestas en varias ciudades del país que fueron especialmente sangrientas en el sur, donde murieron decenas de personas por choques con las fuerzas de seguridad, según testigos, informa EFE.

Aunque no hay una confirmación independiente, la cadena catarí Al Yazira informó de que 20 personas fallecieron hoy al reprimir las fuerzas de seguridad una manifestación en la ciudad de Sanamein, unos 50 kilómetros al sur de Damasco.

La agencia France Press indica , citando a un militante pro-derechos humanos, que los muertos llegan a 17 personas.

En un nuevo viernes de tensión, las fuerzas de seguridad han vuelto a abrir fuego contra los manifestantes en varias ciudades. El mayor número de víctimas del que se tiene constancia se ha producido entre un grupo de personas que marchaba hacia Deraa, informa El País.

Según dos residentes de Sanamein contactados por teléfono por Al Yazira, la manifestación que se desarrolló en esa ciudad fue pacífica pero agregaron que, aun así, la Policía decidió usar fuego real para dispersar a los participantes en la protesta, indica EFE.

El País, citando a AFP, acotó que horas después, una fuente que ha pedido el anonimato y que sería un «alto responsable sirio», ha reconocido que las fuerzas del orden habían matado a 10 personas.

La protestas comenzaron después de las oraciones del mediodía del viernes, la celebración religiosa semanal más importante para los musulmanes, cuando activistas de la oposición comenzaron una marcha en solidaridad con las víctimas de la ciudad sureña de Deraa.

La agencia oficial SANA, posiblemente aludiendo a estos choques, informó, citando a una fuente oficial no identificada, que varias personas murieron hoy cuando una «banda armada» atacó la sede del Ejército en esa ciudad.

«Los guardias de la sede del Ejército hicieron frente a esta banda y el enfrentamiento resultó con la muerte de varios atacantes», agregó la agencia oficial.

El jueves, la portavoz gubernamental Buthaina Shaaban aseguró que «el Presidente no quiere que se derrame ni una gota de sangre».

Anunció una serie de medidas, como el aumento de los salarios a los empleados públicos y analizar el fin del estado de emergencia que se remonta desde 1963.