La organización no gubernamental Manos Unidas obtuvo el premio Príncipe de Asturias de la Concordia 2010 por «su apoyo generoso y entregado a la lucha contra la pobreza y en favor de la educación» en más de 70 países a lo largo de sus 50 años de existencia.

Manos Unidas, que destinará los 50.000 euros (unos 65.000 dólares) de dotación del premio a un nuevo proyecto para la reconstrucción de Haití, llegó a las últimas votaciones del jurado junto a la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y a la dirigente de la oposición democrática birmana Daw Aung San Suu Kyi, Nobel de la Paz en 1991.

La presidenta de Manos Unidas, Myriam García Abrisqueta, agradeció «de corazón» a todos los que colaboran y trabajan para mejorar la calidad de vida de quienes viven «situaciones injustas».