La matanza en la escuela Sandy Hook, en Newtown, una de las peores de la historia reciente de EEUU,  abrió el espinoso debate sobre la posesión de armas en un país en el que muchos habitantes aman sus pistolas y rifles, lo que convirtió la libertad individual en un pilar inquebrantable.

Comprar armas. Ésa fue la reacción de muchos estadounidenses tras la masacre perpetrada por Adam Lanza, el joven de 20 años que irrumpió el 14 de diciembre con un fusil y dos pistolas en la escuela Sandy Hook, y mató a 20 niños, de entre 6 y 7 años, y a 6 adultos después de asesinar a su madre y antes de quitarse la vida.

Otros muchos ciudadanos abogan a raíz de esta matanza por tener seguridad armada en los colegios de Primaria, en un país donde 31 mil personas murieron por disparos de armas de fuego en 2010. Sin embargo, más de la mitad de los participantes en una encuesta de The Washington Post cree que el tiroteo en Newtown es un reflejo de los problemas de la sociedad.

En la misma línea, el presidente Barack Obama subrayó en una vigilia por las víctimas que se requieren cambios profundos y además se comprometió a presentar en enero propuestas “específicas” para el control de armas que prevendrán tragedias como la de Newtown.

El enfoque de la Casa Blanca no es sólo una legislación sobre la posesión de armamento, un derecho recogido en la Segunda Enmienda de la Constitución estadounidense, considerada sagrada por los defensores de las armas. También se busca abordar la cultura de la violencia y la atención a personas con problemas mentales, como parece que era el caso de Lanza, en un país sin sanidad universal ni gratuita.

Aunque el debate sobre las armas es políticamente peligroso, la masacre de Newtown es un punto de inflexión, como en su día fue la de Columbine (1999), para senadores como el demócrata Joe Machin, favorable a la tenencia de armas y que sostiene que es hora de un debate “real” sobre el control.

Incluso la influyente y poderosa Asociación Nacional del Rifle (NRA, en inglés) aseguró “estar preparada para ofrecer una colaboración significativa” para que tiroteos como el de Newtown “nunca vuelvan a ocurrir”.

La prohibición a la venta de armas de asalto estuvo vigente entre 1994 y 2004, cuando ni el entonces presidente George W. Bush ni la mayoría republicana que había en el Congreso hicieron nada para prorrogarla.

En EEUU la posesión de armas y la defensa del derecho a llevarlas está, por lo general, mucho más arraigada en las zonas rurales que en las urbanas y las leyes al respecto varían mucho de un estado a otro. Una de las pistolas usadas por Lanza era una Glock calibre diez milímetros, utilizada por los policías de Groenlandia para el caso de que tengan que enfrentarse a un oso polar, lo que da un ejemplo de la elevada potencia que tienen algunas de las armas que se venden en el país. Lanza también empleó un fusil de asalto semiautomático, el Bushmaster AR-15 (la versión civil del militar M-16).

Cada año 100 mil víctimas

Cada año, unas 100 mil personas son heridas o muertas a balazos en EEUU, según el Centro Brady para el Control de Armas. EFE

Venta de armas sube pese a la matanza
EFE – Washington

Entre la congoja por otra matanza escolar y las protestas que siguen a cada uno de estos trágicos sucesos repetidos en Estados Unidos, la comercialización de armas de fuego sigue encaminada a cifras sin precedentes este año.

Si bien no hay datos globales oficiales sobre la venta anual de armas de fuego en EEUU, es posible hacerse una idea de la tendencia. La adquisición legal de armas (la realizada en armerías con licencia) requiere una verificación de los antecedentes penales del comprador, que la efectúa la Oficina Federal de Investigación (FBI).

Hasta finales de noviembre, el FBI había hecho 16, 8 millones de esos trámites, lo cual ya sumaba 350 mil más que en todo 2011.

Diciembre es el mes de mayor venta de armas, por lo que los expertos deducen que habrá casi   2 millones más de trámites de verificación en 2012, pese a las matanzas ocurridas. Es la cifra más alta desde que la Policía federal empezó a publicar el dato (1998).

En el país del norte hay más de 129.817 armerías con licencia federal para la venta de armas, de las cuales 51.438 son tiendas de armas, 7.356 son casas de empeño y 61.562 son coleccionistas. El resto de las licencias pertenecen a fabricantes e importadores. A esto debe añadírsele todo el comercio de armas no reglamentado (entre particulares legales) y el comercio ilegal de armas, como el tráfico entre bandas de delincuentes, etc.

Enterraron a las víctimas preguntando  ¿por qué?
EFE – NEWTOWN (EEUU)

En medio de un ambiente gris, la pequeña localidad de Newtown enterró esta semana a los niños que fueron asesinados en la masacre del 14 de diciembre, mientras sigue preguntándose por los motivos de un crimen que conmocionó a todo EEUU.

Las investigaciones avanzan lentamente y, de momento, sólo añaden más detalles truculentos, como que el autor, el joven introvertido Adam Lanza, disparó cuatro veces en la cabeza a su madre, Nancy, mientras dormía.

La personalidad de la progenitora, coleccionista de armas y aficionada a las prácticas de tiro, guarda sin duda una de las claves de este sangriento suceso.

La otra, por supuesto, la tiene el autor. El forense detalló que el joven Lanza, de 20 años, se quitó la vida en la escuela de un único disparo en la frente.

La Policía descartó que Adam estuviera bajo medicación en el momento en que perpetró la masacre, aunque los padres (divorciados) de Lanza habían dicho en alguna ocasión a su círculo de amigos que su hijo padecía el síndrome de Asperger, una variante del autismo, aunque no se sabe si fue diagnosticado formalmente.

Sube venta de mochilas antibalas para niños
EFE – WASHINGTON

Las ventas de mochilas para niños resistentes a las balas y de otros productos como pantalones blindados ha aumentado en los últimos días en EEUU a raíz de la masacre en la escuela de Newtown (Connecticut), donde Adam Lanza mató a 20 niños y seis adultos.

La tienda Amendment II, especializada en productos militares y de seguridad, informó a CNN que las ventas se dispararon en “500%” y que muchos clientes son padres “desesperados” que buscan cómo proteger a sus hijos en situaciones “extremas”. Uno de los artículos con más demanda es la mochila infantil blindada ($us 400).

Esas mochilas están diseñadas con un material capaz de detener las balas de las pistolas, pero no las de un fusil como el usado por Lanza en el tiroteo de Newtown.

En Texas, la tienda Bulletproofme.com, especializada en productos con protección antibalas, afirma que subió sus ventas en 50% y que sus clientes nuevos son, sobre todo, escuelas y guarderías.

Legisladores de varios estados plantean medidas para que los profesores y otros trabajadores de los colegios puedan portar armas para proteger a los alumnos.