El legendario pistolero del Lejano Oeste «Billy the Kid» sigue siendo un forajido para la justicia de EEUU, después de que el gobernador saliente de Nuevo México, Bill Richardson, le negara un simbólico indulto.

Después de una cuidadosa consideración, Bill Richardson concluyó su mandato como gobernador de Nuevo México negándole el indulto a Henry «Billy the Kid» McCarty, un forajido que mató a 21 personas y murió de un balazo disparado por el sheriff Pat Garrett.

La carrera criminal de Billy, conocido también por sus nombres falsos de Henry Antrim y William Bonney, terminó el 14 de julio de 1881; pero, desde entonces, ha persistido la polémica acerca de si el gobernador de lo que era entonces territorio de Nuevo México, Lew Wallace, le había prometido un indulto.

Richardson, quien había recibido numerosos pedidos de indulto póstumo para el pistolero, dijo que «los hechos no sustentan la reivindicación».

«He decidido no indultarlo porque no se puede llegar a una conclusión y debido a la ambigüedad histórica acerca de por qué el gobernador Wallace renegó de su promesa», declaró Richardson en el programa Good Morning America de la cadena ABC de televisión.

Nadie sabe con certeza la fecha de nacimiento del pistolero, pero se cree que fue entre 1859 y 1861, en el seno una familia pobre, y que empezó a delinquir cuando se quedó huérfano en la adolescencia. La leyenda de «Billy the Kid» y su encuentro fatal con Garrett han dado material para novelas, películas e historietas.