Países de UE respaldan a París y no descartan enviar tropas de combate a Mali
El ministro francés de Exteriores, Laurent Fabius, consideró "absolutamente posible" que algún país pueda enviar tropas de combate a Mali, aunque recordó que la decisión compete a cada Estado.
La Unión Europea (UE) expresó hoy su total respaldo a la intervención de Francia en Mali y varios Estados miembros ofrecieron su apoyo militar a París, sin descartar la posibilidad de enviar tropas para combatir contra los grupos terroristas que controlan el norte del país.
Tras reunirse con los ministros de Exteriores de los veintisiete países de la UE, la jefa de la diplomacia comunitaria, Catherine Ashton, confirmó que varios gobiernos se han declarado «dispuestos a ayudar y apoyar a Francia por cualquier medio».
«No descartaron ningún aspecto, incluido el apoyo militar», dijo Ashton sobre esos Estados, que no precisó.
En la misma línea, el ministro francés de Exteriores, Laurent Fabius, consideró «absolutamente posible» que algún país pueda enviar tropas de combate a Mali, aunque recordó que la decisión compete a cada Estado.
«No podemos forzarles a hacerlo. Hay límites en la política de seguridad y defensa», señaló.
Hasta ahora, varios países han facilitado a Francia apoyo logístico -entre ellos Reino Unido, Alemania, Bélgica y Dinamarca- y otros han dicho que lo estudian, caso de España o Italia, pero ninguno ha expresado voluntad de participar directamente en las operaciones en Mali.
El titular español de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, indicó en Bruselas que el Consejo de Ministros estudiará mañana posibles acciones por parte de España, pero descartó que el Ejército se involucre en operaciones de combate.
Según fuentes comunitarias, la posibilidad de que algún país envíe soldados junto a los franceses a Mali no se discutió hoy abiertamente en la reunión extraordinaria celebrada por los responsables de Exteriores de la UE y, en cualquier caso, esa cooperación se llevaría a cabo en el plano bilateral.
La UE como bloque sí enviará una misión militar a Mali para formar al Ejército local, cuyo establecimiento aprobaron hoy los ministros, que también nombraron al comandante de la operación, el general francés François Lecointre.
La misión europea estará formada por unos 450 efectivos, con 200 formadores que se encargarán de entrenar a cuatro batallones del Ejército maliense para permitir que puedan hacer frente a los grupos terroristas que controlan el norte del país.
La operación cuenta con un mandato de 15 meses y con un presupuesto común de 12,3 millones de euros, a los que se suman los costes en los que incurrirán los países participantes.
Al menos ocho países ya han confirmado su voluntad de participar en la misión (España, Francia, Alemania, Italia, Suecia, Estonia, Eslovenia y Bélgica) y se da por hecho que el número aumentará.
España, explicó García-Margallo, ha preparado a 50 efectivos para participar en esas actividades.
La UE ha acelerado ligeramente los preparativos del despliegue de sus formadores, que podría hacerse efectivo a mediados de febrero, aunque el entrenamiento no comenzaría hasta marzo.
Mali destacó hoy la importancia de este apoyo europeo por boca de su ministro de Exteriores, Tieman Hubert Coulibaly, que participó en la primera parte de la reunión de los titulares europeos.
Coulibaly hizo hincapié en que toda la comunidad internacional debe involucrarse en la lucha contra los grupos terroristas que operan en el Sahel, pues suponen una amenaza para todos los países.
Fuera del plano puramente militar, la UE también abrió hoy la puerta a desbloquear la ayuda económica a Mali, congelada desde el golpe de Estado del pasado año y que podrá alcanzar los 250 millones de euros.
Para ello, el Gobierno de Bamako debe presentar una «hoja de ruta» para devolver el orden democrático al país, un plan que Coulibaly anunció que será dado a conocer en los próximos días.
Según explicó, el mismo tendrá dos fases diferenciadas: la primera centrada en recuperar el control del norte del país, con la ayuda de la fuerza africana que intervendrá en Mali bajo mandato de la ONU, y la segunda en la organización de elecciones libres.
El encuentro de los ministros de la UE se celebró bajo la sombra de asalto a una instalación gasística en Argelia, un incidente que ni Bruselas ni Bamako quisieron vincular al conflicto en Mali, pero que pusieron como ejemplo del peligro que plantea la amenaza del terrorismo yihadista.