El Senado de Paraguay ratificó la posición del Ejecutivo respecto a que Argentina cometió una “violación” a la soberanía del país con las obras que ejecuta para la apertura de un canal de desvío en el río Pilcomayo.

Un día después de que el ministro paraguayo de Obras, Enrique Salyn Buzarquis, considerara como una “abierta violación a la soberanía nacional” las obras realizadas en el río por Argentina, la Cámara Alta sentó la misma postura, a través de un proyecto de declaración aprobado en su sesión semanal.

El Senado “rechaza la decisión unilateral, inconsulta, al realizar los trabajos en la zona del cauce compartido del río Pilcomayo, por constituir una abierta violación a la soberanía nacional y a los tratados internacionales en materia del Pilcomayo”, remarca el documento aprobado por los senadores. La declaración también insta al Ejecutivo paraguayo, por intermedio de la Cancillería, a adoptar las medidas diplomáticas necesarias sobre el asunto.

El 6 de julio, la Cancillería denunció ese hecho en un comunicado en el cual también exigió a Argentina la “inmediata paralización” de la obra que se lleva a cabo en la zona de la embocadura de la cuenca inferior de ese recurso hídrico, sin el consenso de la Comisión Binacional Administradora.

Según fuentes de esa comisión, el nuevo canal (que está en etapa de terminación) podría dejar “prácticamente sin agua” a la zona baja del Chaco. Las relaciones entre ambos países pasan por momentos de tensión, debido al rechazo del Gobierno argentino por la administración del actual presidente paraguayo, Federico Franco.