Un agricultor y su esposa murieron quemados la madrugada de ayer en el incendio intencional de su vivienda en una zona mapuche del sur de Chile, en un ataque calificado de “terrorista” por el Gobierno, que volvió a centrar la atención en el conflicto latente con la mayor etnia autóctona chilena.

“Estamos en presencia, una vez más, de un acto de carácter terrorista, de un acto gravísimo de atentado a la vida de dos personas que han sido todo un símbolo en la lucha por la defensa de sus tierras”, dijo a periodistas el ministro del Interior, Andrés Chadwick. El Gobierno cree que en la región opera un grupo radical que tendría financiamiento extranjero.