Pasajeros esperaron hasta 11 horas en el aeropuerto JFK
Desembarco. Las líneas no tenían asignadas puertas de salida
Cientos de pasajeros han tenido que pasar hasta 11 horas atrapados en sus aviones, sin poder desembarcar en el aeropuerto JFK, a causa de los efectos del temporal de nieve que azotó la costa este de EEUU, informó ayer la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey.
«El problema es que las aerolíneas dejaron partir los aviones desde sus puntos de origen sin comprobar que tenían una puerta de desembarque asignada», explicó a EFE el portavoz de la Autoridad Portuaria, Steve Coleman.
En consecuencia, prosiguió el portavoz, cuatro de esos aviones que aterrizaron la madrugada del martes en el aeropuerto JFK de Nueva York tuvieron que esperar durante horas en la pista hasta que se les asignó una puerta para desembarcar.
Uno de esos aviones, que operaba un vuelo de Cathay Pacific Airways procedente de Vancouver, Canadá, tocó tierra en Nueva York a las 2.15, ocho horas después de la reapertura del principal aeropuerto de Nueva York tras la nevada que lo mantuvo cerrado unas 24 horas y que trastocó el tráfico aéreo en el noreste de EEUU.
Los otros tres aviones, uno de British Airways, otro de Iceland Air Express y un tercero de Cathay Pacific Airways, aterrizaron poco tiempo después y tampoco pudieron desembarcar a sus pasajeros. Los viajeros tuvieron que pasar el resto de la noche y toda la mañana en el interior de las aeronaves, sin poder recibir agua o alimentos del personal de tierra.
Según la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey, los últimos pasajeros de estos cuatro vuelos pudieron abandonar las aeronaves alrededor de las 13.00.
«Por fin en casa, caray. Llegamos al JFK a eso de las 2 de la madrugada y nos quedamos atrapados en el avión hasta la 1 de la tarde. Dieciocho horas en un avión», escribió en su cuenta de Twitter Injoong Kim, uno de los pasajeros del vuelo de Cathay procedente de Vancouver.
El portavoz de la Autoridad Portuaria reconoció que los efectos del temporal de nieve habían reducido la capacidad del aeropuerto para operar sus instalaciones, pero insistió en que son las aerolíneas las responsables de asegurarse de que se les ha asignado una puerta para desembarcar antes de dar el visto bueno al despegue.
Los tres grandes aeropuertos que dan servicio a Nueva York —el JFK, Newark y La Guardia— permanecieron cerrados desde la noche del domingo hasta el anochecer del lunes a causa de la acumulación de nieve en sus pistas y la falta de visibilidad.
El mal tiempo obligó a la cancelación de unos 6.000 vuelos en todo el país en medio de una de las temporadas de mayor actividad del año, por lo que más de 1.400 personas tuvieron que dormir al menos una noche en las terminales áreas, según la Autoridad.
Como en un campo de refugiados
«El JKF tiene la pinta de un campo de refugiados deprimente, con gente tirada en el suelo y mucha basura», explico en Twitter Graham Rowat, uno de los pasajeros. Las aerolíneas ya han advertido que llevará días acomodar a miles de pasajeros que han perdido vuelos.