El Presidente de Estados Unidos afirmó este sábado que el G-8 está “unido” respecto de la posición a adoptar ante el controvertido programa nuclear iraní, en la apertura de los trabajos de la segunda jornada de la Cumbre de Camp David.
“Pienso que concordamos en que Irán tiene derecho a un (programa) nuclear pacífico, pero que sus continuas violaciones de las normas internacionales y su incapacidad para probar hasta el presente que no trata de militarizarlo, constituye un grave motivo de inquietud para todos nosotros”, afirmó Barack Obama.
A pocos días de la reanudación de las negociaciones del Grupo de los Seis (EEUU, Francia, Rusia, Gran Bretaña, China y Alemania) con la República Islámica en Bagdad, Obama afirmó que sus socios tienen “esperanzas” en sus resultados.
“Estamos firmemente comprometidos en continuar con la política de sanciones y presiones, junto a las negociaciones diplomáticas. Esperamos poder resolver este problema de forma pacífica, que respete la soberanía de Irán y sus derechos en el seno de la comunidad internacional, pero que reconozca también sus responsabilidades la República Islámica”, declaró Obama.
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