El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU logró ayer abrir un puente aéreo urgente para mandar alimentos desde Nairobi a Mogadiscio, una semana después de declararse el estado de hambruna en dos regiones del sur de Somalia.

«El avión que salió lleva al menos 10 toneladas de una comida nutricional especialmente diseñada para tratar la malnutrición en los niños», declaró a EFE Challiss McDonough, portavoz del PMA en la capital keniana. Estos vuelos —matizó— se repetirán en las próximas semanas, «si no diariamente», por lo menos con una cierta regularidad.

«Vamos a llevar a cabo una serie de vuelos —subrayó la portavoz— para poder hacer llegar suficiente comida para asistir a unos 30.000 niños en Mogadiscio». El  Boeing 737 con cargamento procedente de Francia, pudo despegar ayer tras superar trabas burocráticas que el martes impidieron su salida en el Aeropuerto Jomo Kenyatta de Nairobi.

Antes de partir, otro portavoz del PMA, David Orr, que viajó a bordo del avión, dijo a EFE que, «en los siguientes 10 días, se espera llevar hasta Mogadiscio por vía aérea unas 80 toneladas en total» de ese tipo de alimentos para niños malnutridos.

Ya en el aeropuerto de la capital somalí, Orr confirmó ante los periodistas que «habrá más vuelos como éste». «Traeremos comida, tiendas y otros utensilios básicos», subrayó el portavoz del PMA.

El cargamento fue transportado en un convoy hasta los almacenes de la agencia de la ONU en Mogadiscio, donde se guardarán hasta su distribución, tan pronto como sea posible, entre los niños malnutridos de los campamentos de la ciudad, indicó Orr.