El jefe del Ejecutivo aseguró que las nuevas medidas son parte de las obligaciones contraídas por España con la Unión Europea, y las justificó también por unas perspectivas económicas para 2013, que calificó de «sombrías» y que son más negativas de lo previsto.

Durante una intervención en el Congreso de los Diputados para explicar los resultados de la última cumbre de la Unión Europea, Rajoy precisó que en 2013 «todo apunta a que la situación recesiva continuará, pero más cerca del 0 %», frente al crecimiento esperado del 0,2 % del PIB.

Entre las medidas que se adoptarán de forma «inmediata», Rajoy anunció una subida del tipo general del IVA del 18 al 21 %, así como del 8 al 10 % en el caso del tipo reducido. En cambio, se mantendrá el 4 % en el tipo superreducido para productos de primera necesidad.

Rajoy se refirió también a uno de los más graves problemas de la economía española, el desempleo, cuando dijo que «5,7 millones de personas salen cada mañana de su casa a buscar trabajo y no lo encuentran».

Pero añadió que «en la situación actual, hoy en España crecer y crear empleo no es posible, atravesamos la segunda recesión más grave de nuestra historia, con un decrecimiento de la actividad económica cercana al 2 %».

En ese sentido, anunció que los nuevos desempleados verán reducida su prestación a partir del sexto mes, aunque se mantendrá el periodo máximo de 24 meses de duración de esta ayuda.

El presidente del Gobierno señaló igualmente que los funcionarios públicos y altos cargos no cobrarán la paga extra de Navidad en 2012, pero que los empleados públicos la recuperarán como fondo de pensiones en 2015.

También se eliminará la deducción fiscal por compra de vivienda a partir del año 2013, y dijo que se procederá este mismo año a un nuevo ajuste en las partidas de los departamentos ministeriales de 600 millones de euros.