El policía Víctor Alfonso González, liberado por las FARC el 15 de febrero junto con su colega Cristian Camilo Yate, denunció ayer que durante el cautiverio de menos de un mes la guerrilla les agredió, les torturó y les amenazó con “picarlos con una motosierra”.
En una entrevista con El Tiempo, González relató su experiencia desde que guerrilleros de las FARC los secuestraron el 25 de enero hasta su liberación el anterior viernes. “Investigábamos actividades de microextorsión en el Valle del Cauca y dimos con un grupo de 15 guerrilleros. (…) Nos subieron a una camioneta. Nos amarraron las manos a la espalda, nos golpeaban, nos pateaban”, indicó.
Después, los llevaron hasta un descampado, les quitaron la ropa, les preguntaron por sus actividades en la zona y, al responder, les golpearon en la cara con la rodilla. En la cuarta noche les torturaron al colocarles una bolsa llena de aceite en la cabeza que les impedía respirar mientras les agredían.
“En la quinta noche (…) nos metieron en una habitación y un guerrillero le dijo a otro: ‘Llame a su tío, dígale que aliste la motosierra, que la traiga mañana temprano, porque si estos ‘manes’ no hablan los vamos a picar’ para echarnos a los perros”, recordó.
Según González, este trato se extendió “hasta el sexto o séptimo día, hasta que la presión del Gobierno los obligó a aceptar” que los tenían en su poder.