Tras su derrota ante Apple en la justicia californiana, Samsung trataba de tranquilizar a los accionistas, empleados y consumidores, pese a la enorme multa impuesta al grupo surcoreano y a la amenaza de que se prohíban sus productos. Ayer, su título en bolsa cayó en 7,5%, la peor pérdida registrada por la multinacional en casi cuatro años.

Samsung, empresa número uno en el mundo por ventas de teléfonos móviles, anunció el sábado que recurrirá la sentencia en el contencioso con Apple, al que tiene que pagar una multa de al menos $us 1.000 millones por violación de patentes.

Apple, que se convirtió recientemente en la empresa con mayor capitalización bursátil de todos los tiempos, alcanzó un 1,9% en Wall Street y un 2,45% en la Bolsa de Fráncfort.

El grupo estadounidense solicitó ayer a la justicia prohibir la venta en EEUU de ocho teléfonos móviles de Samsung que son vendidos por ATT, Verizon y T-Mobile, que según el dictamen de un jurado de un tribunal federal el pasado viernes, violaron las patentes del icónico teléfono inteligente iPhone de Apple.

Apple solicitó también al tribunal prohibir algunos de los nuevos teléfonos 4G de la línea Samsung Galaxy, así como el Droid Charge vendido a través de Verizon.