Siria forma un nuevo gobierno; incluye oposición
El Gobierno sirio aprobado ayer por el presidente Bachar al Asad incluye a dos figuras de la oposición y un Ministerio para la Reconciliación Nacional, pero mantiene a pesos pesados del régimen como los ministros de Defensa y Exteriores.
La aparición de dos opositores “tolerados” en el gabinete del primer ministro Riad Hiyab—nombrado hace 17 días—, ha sido interpretado dentro de Siria como un gesto a la oposición interna, supuestamente más inclinada a llegar a acuerdos con el régimen sobre las reformas en el país.
El líder del Partido Social Nacionalista Sirio, Ali Haidar, asumirá la nueva cartera de Reconciliación Social, mientras que el presidente del Frente Popular para el Cambio y la Liberación, Qadri Yamil, será viceprimer ministro para Asuntos Económicos y ministro de Comercio.
Al mismo tiempo, los titulares de Defensa, Daud Rajha, y Asuntos Exteriores, Walid al Mualem, ascienden un peldaño y obtienen también el cargo de viceprimer ministro.
La prensa siria cree improbable que el Ejecutivo se desmarque de la política del régimen hacia “grupos terroristas”, como denomina Damasco a los rebeldes armados que tratan de acabar con el régimen de Al Asad.
La designación de un nuevo Ejecutivo se produce tras la celebración de las elecciones legislativas el 7 de mayo, de las que salió un Parlamento con mayoría de la coalición a la que pertenece el partido gubernamental Baaz y que fueron boicoteadas por la mayor parte de la oposición al considerarlas una farsa.
Esos comicios fueron parte de las reformas prometidas por el régimen, entre ellas la aprobación en referéndum de una nueva Constitución. La violencia, sin embargo, no se ha detenido. Grupos de la oposición hablan de más de 13 mil personas muertas en todo el país desde el comienzo de la rebelión, en marzo de 2011.
Tensión por derribo de caza
AFP
El régimen de Bashar al Asad en Siria, donde el viernes murieron más de 100 personas en una nueva jornada de violencia, reconoció ayer el derribo de un caza turco en su espacio aéreo, mientras Turquía estudiaba una respuesta que puede tener graves consecuencias.
El incidente, el primero de este tipo desde el inicio de la revuelta contra el régimen sirio en marzo de 2011, complica las relaciones ya tensas entre los dos países vecinos y que habían sido aliados.
Turquía rompió relaciones con el presidente Asad por la represión en Siria.
El viernes Ankara esperó 12 horas para confirmar que su caza F-4 Phantom, que despegó de la base de Malatya (sureste), fue derribado por la defensa antiaérea siria. El presidente turco, Abdulá Gul, reconoció que el avión pudo haber entrado en espacio aéreo sirio.