Esta situación se producía al día siguiente de la resolución de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas que denuncia la impotencia de la diplomacia para detener el conflicto que dejó más de 21 mil muertos desde marzo de 2011, según el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

«Hemos limpiado todos los barrios de Damasco, de Midan a Mazé, Qadam, Hajar al Aswad y Tadamun», afirmó el general a cargo de las operaciones en el sur de la capital, que guiaba a un grupo de periodistas.

Estable. «La situación en Damasco es excelente y estable. Ya no hay presencia de grupos armados, con la excepción de unos individuos que se mueven de un lugar a otro para demostrar que existen», agregó el general.

La oposición confirmó esta información proveída. «El Ejército Sirio Libre se retiró de Tadamun pero sus miembros están presentes en toda la capital en donde llevan a cabo ataques puntuales y luego desaparecen», dijo a la agencia AFP Lena al Shami, una militante.

El OSDH había hablado de un «bombardeo de una intensidad nunca vista hasta ahora» en Tadamun, en donde estaban atrincherados los rebeldes. Por otra parte, en la región de Damasco, «grupos armados terroristas» secuestraron a 48 peregrinos iraníes que se dirigían en autobús al aeropuerto, según la agencia oficial Sana.

Bombardeos. En Alepo (355 km al norte de la capital Damasco), cuyo control es considerado crucial en este conflicto, la Fuerza Aérea y la artillería bombardearon sectores donde se atrincheran los rebeldes, como los barrios de Shaar y Sajur, al este, y los de Salahedin y Seif al Dawla al oeste.

El bastión rebelde de Salahedin ha sido machacado por los «bombardeos más violentos desde el inicio de la batalla, pero el Ejército de Bashar (al Asad, presidente sirio) no logró avanzar», señaló a la AFP el coronel Abdel Jabar Oqaidi, jefe del comando militar del ESL, integrado por desertores y civiles armados.

Un responsable de seguridad de la región declaró que estos ataques no son más que el «inicio» de una gran batalla. Al menos 20 mil militares han sido enviados como refuerzo a Alepo, según este responsable que también afirmó que los rebeldes hacen lo mismo. El OSDH dio cuenta ayer de la muerte de 67 personas: 42 civiles, 18 soldados y siete rebeldes.