Bolívar pagó con una goleada y una dosis de buen fútbol la deuda que tenía con su hinchada, despachando sin discusión a Oriente (4-1), ayer en el estadio Hernando Siles. La Academia dio señales de que con plantel completo es otra cosa: jugó con argumentos sólidos y tuvo futbolistas con las luces encendidas. Además, el rival era un peso pesado, factor que hacer más meritorio el triunfo.
El cruceño no vino a especular, intentó desplegar su juego y a ratos causó preocupación en la última línea celeste. En la primera parte, Rudy Cardozo manejó el juego del celeste y anotó el primer gol a los seis minutos: con talento y decisión culminó un buen pase de Leonel Justiniano, ingresó al área por izquierda y con habilidad se acomodó para a su mejor perfil y definió con precisión.
Oriente asimiló el impacto y estuvo cerca de empatar, pero Romel Quiñónez extremó recursos para quedarse con pelotas enviadas por Miguel Hoyos y Alejandro Meleán. De contra, Bolívar buscó ampliar la diferencia. Lizio se apresuró cuando podía avanzar unos metros más y sacó un remate que salió desviado. Y en la última jugada del primer tiempo, el argentino ejecutó un tiro libre que el golero visitante resolvió.
En la segunda parte los errores de Britos terminaron por fundir el planteamiento de Oriente, porque a los dos minutos Zabala le entregó el balón al arquero, quien intentó despejar pero pifió y el panameño Luis Rentería sacó provecho de ese grueso error para, con arco vacío, aumentar la diferencia.
Esa anotación le dio tranquilidad al celeste que siguió atacando con un Jhasmani Campos inspirado que firmó el mejor gol de la tarde, pues vio a Britos adelantado y desde más de media cancha mandó la pelota que terminó en el arco contrario (20’). Quiñónez también regaló un gol, debido a que soltó la pelota tras un tiro de Meleán a los 25 minutos. La goleada fue completada por Damián Lizio, quien trató de mandar un centro, pero la pelota rebotó en Marvin Bejarano y descolocó a Britos (31’).
El celeste no jugará a media semana
Pausa
Bolívar no jugará a media semana su partido de la primera fecha porque el cotejo con Aurora fue postergado hasta el 24 de octubre, por la presencia del valluno en la Sudamericana.
Sin invicto
Ayer se terminó el invicto de Oriente, que era el único que tenía esa condición en el torneo Apertura. La derrota caló hondo y hubo silencio en el vestuario.
Los arqueros ayudaron a los adversarios a marcar goles
No fue la tarde de los arqueros en el estadio Hernando Siles: Sebastián Britos regaló dos tantos para el triunfo de Bolívar, mientras que Romel Quiñónez ayudó con lo suyo en el descuento de Oriente Petrolero. El técnico Erwin Sánchez no podía creer lo que veía desde el cuarto piso, cuando Britos pifió un rechazo y dejó el balón servido para que Luis Rentería anote el segundo gol de la Academia. Una vez que fue superado, el golero se tiró al piso intentando frenar con falta al rival.
Después, Jhasmani Campos lo vio adelantado y se mandó un golazo desde casi media cancha. “Fue un partido extraño, raro desde donde se lo vea. Nuestros errores nos costaron caro, nos hicieron un gol en salida nuestra, salimos a buscar el empate, nos hicieron el segundo. Dejamos espacios que ellos aprovecharon”, se lamentó Erwin Sánchez.
El bolivarista Romel Quiñónez estaba atajando bien hasta que le tocó el turno. Alejandro Meleán recibió un pase y desde fuera del área remató, parecía que era una acción sin consecuencias, pero Quiñónez quiso agarrar la pelota y ésta se le escurrió entre las manos para lentamente meterse en su arco.
El árbitro
Gery Vargas dirigió mal, dejó golpear toda la tarde a los jugadores de Oriente. Wílder Zabala debió irse antes, pues descargó toda su impotencia contra los jugadores de la Academia.
Vuelta
Juan Carlos Arce por fin pudo darse el gusto de debutar en un partido de Liga con Bolívar. Todavía no está en condiciones físicas ideales, pero le alcanzó para jugar diez minutos.
La figura
Jhasmani Campos jugó 35 minutos que fueron suficientes para anotar un golazo y permitirse algunos lujos en la cancha. Bolívar espera de él más actuaciones como la de ayer.
Bien
Rudy Cardozo jugó bien, pero desde el ingreso de Campos su producción bajó, por la decisión del DT de retrocederlo unos metros para que cumpliera el rol de lateral.