The Strongest tiene la sartén por el mango, está a un punto de consagrarse tricampeón del certamen. Suma 43 unidades después de 20 presentaciones, le bastará un empate el domingo en casa de Real Potosí para dar una nueva vuelta olímpica.
San José es el único que puede poner en riesgo su primer lugar, sus chances son mínimas, pero son posibilidades al fin. Está obligado a ganar en sus dos presentaciones (Universitario y La Paz FC) y esperar que el Tigre tropiece en sus respectivos compromisos, si ocurre ello habrá empate en el primer lugar. El Reglamento General del Campeonato señala que en caso de que dos equipos igualen en puntos en una casilla que entrega premio deberán definir su posición en un partido extra en cancha neutral.
Pero también hay otros clubes en pugna por clasificarse a jugar el próximo año un torneo internacional de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol). Bolívar, Blooming, Real Potosí y un poco más atrás Wilstermann son los que lucharán por acceder a una plaza en la Libertadores o la Sudamericana.
Ser segundo, tercero o cuarto significa ingresos económicos de los auspiciadores que son siempre bienvenidos por los clubes que, en su mayoría, no gozan de bonanza.
Al momento de hacer el balance general los ejecutivos de la Liga seguramente quedarán satisfechos por el desarrollo del campeonato que hasta el momento tuvo un par de lunares como la decisión de Oriente de no impugnar a Aurora por una falta al reglamento por número de jugadores extranjeros, y dar por válido recién a partir del próximo año que un técnico no dirija a dos equipos en la misma temporada, cuando la norma fue aprobada antes del inicio de este certamen.
Está a punto de cerrarse un año de mucho fútbol, también se acerca la hora del balance de cada club. Para los considerados grandes no ser campeón significa fracaso y conseguir un premio es el consuelo que se utiliza como bálsamo para maquillar su campaña.