Martins llora ‘a mares’, pero descarta renunciar
El autor del gol boliviano anunció que seguirá hasta el final del torneo
Marcelo Martins seguirá en la selección nacional, pese a que “en caliente” dio a entender que su idea era renunciar; sin embargo, más calmado, anoche declaró en Santa Cruz (red Uno) que continuará en la Verde hasta la conclusión de las eliminatorias mundialistas.
Cuando terminó el partido era el más acongojado de todos: se sacó la camiseta verde, la regaló a unos aficionados de la tribuna de preferencia y se metió en el túnel de Miraflores, donde por unos tres minutos lloró desconsoladamente a solas.
Convirtió ante la albiceleste su undécimo gol para la selección boliviana (a los 25 minutos de la etapa inicial, de cabeza), diez de ellos en eliminatorias mundialistas. Rompió una sequía que le perseguía porque la última vez que anotó había sido en el partido de ida precisamente contra Argentina, el 11 de noviembre de 2011 en el estadio de River Plate, en Buenos Aires (1-1).
Su padre Mauro, en unas declaraciones hechas al Panamericano Deportivo, indicó que la decisión de marcharse estaba tomada, pero él lo desmintió. Raldes ha jugado 40 partidos luciendo la camiseta verde y serán más, probablemente también esté en el encuentro amistoso que se disputará en Santa Cruz frente a Brasil el 6 de abril.
Martins se marchó del vestuario sin atender los requerimientos de los medios locales, estaba cabizbajo y se subió a un coche particular, donde enrumbó hacia el hotel de concentración y después se fue al aeropuerto. Poco antes, cuando había dejado el terreno de juego, aún con lágrimas en los ojos atendió un requerimiento de la cadena internacional Fox Sports:
“Voy a hablar con la dirección técnica (con el seleccionador Xabier Azkargorta) y con mi familia para ver si sigo en la selección o sólo en mi club”, sostuvo. Antes habló del partido. Dijo que “es un resultado que duele mucho y hubiese cambiado si conseguíamos la victoria, infelizmente no pudimos”.
Lamentó que en lo personal, aparte de convertir el gol, hubiese tenido otras opciones en el primer tiempo, “pero la suerte no acompañó y no pude convertir”. Virtualmente dio por hecho que Bolivia ya no tiene chance de clasificarse a Brasil 2014. “Creo que debemos mejorar y trabajar más para la próxima eliminatoria”, indicó.
El vasco no quiso decir nada
Sorprendido
Xabier Azkargorta se sorprendió cuando un periodista le preguntó si conocía sobre la renuncia de Marcelo Martins a la selección boliviana. “No me voy a referir al tema porque no he hablado nada con él del asunto”, indicó.
Cara y cruz
El delantero boliviano vivió dos sentimientos diferentes ayer en el Hernando Siles: la alegría por haber anotado el gol de la apertura y la tristeza porque Bolivia no pudo ganarle a Argentina.
Ante Argentina
Martins se acostumbró a hacerle goles a Argentina en eliminatorias mundialistas: el primero convirtió hace cuatro años, en la goleada 6-1 en Miraflores; después, el año pasado, en el empate en Buenos Aires; y repitió ayer para otra igualdad.
Se fueron
La versión que después no se confirmó hizo recordar el camino de la renuncia que tomaron otros jugadores en estas eliminatorias: Pablo Escobar (The Strongest) se marchó después de una victoria contra Paraguay y posteriormente hizo el mismo anuncio Wálter Flores (Bolívar).
El empate dejó sabor a derrota
‘Uno trata de hacer lo mejor’: Sergio Galarza, arquero boliviano
“Uno trata de hacer su trabajo de la mejor manera, quiere dar alegría a la hinchada y al cuerpo técnico que te da confianza para que estés aquí, pero a veces las cosas no salen”.
‘Ojalá los números den’: Ronald Raldes, capitán de la selección
“Estamos tristes, hicimos lo posible para ganar, pero Argentina jugó un gran partido, se defendió muy bien y contragolpeó. Hay que seguir luchando, ojalá los números den”.
‘La clasificación se complica’: Alejandro Chumacero, volante de la Verde
“Hubo opciones de gol, pero no pudimos anotar. Seguiremos luchando y no bajaremos los brazos. Ahora está complicada la clasificación, pero seguiremos adelante”.
Sinónimo de congoja. Óscar Dorado Vega
Excelente negocio para Argentina. Por eso, Alejandro Sabella, al final, desparramó satisfacción indisimulada en cada respuesta. Y si terminó en empate fue porque Galarza sacó tres pelotas de gol; una, al final, en un mano a mano con Messi, que Sergio seguramente no olvidará en su vida… Mucho de lo que aconteció era previsible.
Bolivia tomó para sí el gasto del partido. El visitante se paró —ordenado, compacto— con líneas cercanas, y cada vez que pudo ejerció contragolpes que dañaron a los nuestros, generalmente mal parados de mitad de cancha hacia atrás.
Ya se sabe que en esto los méritos, generalmente, no cuentan. Hay que convertir. Y luego del gol de Martins el elenco nacional no aprovechó cierto desconcierto albiceleste. Todo lo contrario. Se descuidó y propició el empate de Banega, justo en un momento psicológico, aquel que antecedió al descanso.
La segunda parte mostró a un local sin ideas. Agotado de piernas, pero sobre todo mentalmente. Los cambios no modificaron absolutamente nada y más de una falla defensiva aproximó al visitante a la obtención de los tres puntos. Está dicho que Galarza —encumbrado a la condición de figura— evitó el desastre mayor.
¿Por qué no se ganó? Razones sobran: casi siempre se jugó al ritmo que a Argentina le convenía. La Verde volvió a fallar en la puntada final. El esfuerzo de Galarza, Chumacero y Martins no tuvo compañía ni sintonía del resto. El pretendido uso de las bandas se quedó en discurso. Las imprecisiones revelaron cuánto de nervios existía. Ah, y aunque suene a obviedad, enfrente estaba Argentina; porque si Leonel Messi apareció esporádicamente, Di María, Campagnaro y Banega, por citar sólo a algunos, hicieron los deberes que la ocasión demandaba.
Óscar Dorado Vega es corresponsal en Bolivia de Fox Sports.