Vencedor en dos de los tres últimos Grandes Premios de esta temporada de Fórmula 1, el alemán Nico Rosberg (Mercedes) pretende continuar su buena racha mañana en casa, en el Gran Premio que se disputa en su país, sobre el circuito de Nurburgring (08.00, hora boliviana).
Pero el también alemán Sebastian Vettel, triple campeón del mundo (2010, 2011 y 2012) y líder del Mundial, que suma tres victorias este año (Malasia, Bahréin y Canadá), aspira a subir a lo más alto del podio en su casa. Rosberg ganó a lo grande en la ciudad en la que reside, Mónaco, a fines de mayo, y el domingo lo hizo en Silverstone.
Mañana, en Nurburgring, al lado del célebre circuito de Nordschleife, Rosberg tendrá la oportunidad de cerrar el círculo ganando en el país en el que nació el 27 de junio de 1985. Hijo del campeón finlandés de Fórmula 1 Keke Rosberg, Alemania es el país que figura en el pasaporte de Nico y de la marca que confía en su figura como un futuro vencedor en la categoría reina.
Junto con el británico Lewis Hamilton, fichado esta temporada, Mercedes ha logrado el objetivo de rejuvenecer el equipo y volver a situar a la marca en la vanguardia de la máxima competición automovilística.
En lo deportivo, los resultados no han podido ser mejores. Después de una sequía que le dio apenas dos podios y dos pole positions entre 2010 y 2012, el balance de este curso es excepcional.
Mercedes ha ganado dos carreras, ha logrado dos podios y ha marcado cinco pole en ocho grandes premios, un botín que empieza a asustar a la todopoderosa Red Bull, vencedora de las tres últimas ediciones del Mundial.
En la última carrera, Vettel iba camino del triunfo, lo que hubiera supuesto su escapada en el Mundial, pero un fallo en su caja de cambios le obligó a retirarse. La aspiración de la organización de la Fórmula 1 es que esta semana no haya problemas con los neumáticos, después de que en Silverstone los pilotos corrieran un gran peligro al producirse cinco pinchazos durante la carrera.
La seguridad es la línea roja que tanto pilotos como escuderías creen que se traspasó en Silverstone y han solicitado a Pirelli, cuyas gomas han causado numerosos problemas en la temporada, una solución definitiva.
Los datos
Primero
El alemán Sebastian Vettel (Red Bull) marcó el mejor tiempo en la segunda sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de Alemania (1’30”416).
Segundo
Por su parte, su compatriota Nico Rosberg (Mercedes) empleó 235 milésimas más (1:30.651), tiempo que le sirvió para ser segundo.
Pirelli cambia los neumáticos
El fabricante italiano Pirelli dio ayer consignas muy estrictas sobre las condiciones de uso de sus neumáticos, tras la ola de pinchazos en Gran Bretaña. Principalmente, Pirelli recomendó a las escuderías “no invertir las gomas traseras, entre el lado izquierdo y el derecho, no inflarlas por debajo de la presión recomendada por Pirelli, y no adoptar un comba demasiado negativa (ángulo de ataque de la rueda completa en relación a la pista) que aumentaría los problemas”.
Tras la catarata de reventones de llantas en el Gran Premio de Gran Bretaña, Pirelli entregó en Nürburgring neumáticos con los que se ensayó brevemente en el Gran Premio de Canadá. Éstos están reforzados por una cintura de kevlar, y no más por acero, como era el caso desde el inicio de temporada.
El jueves por la noche, la Asociación de Pilotos de Grandes Premios (GPDA) amenazó con retirarse del GP de Alemania si volvían a repetirse problemas de pinchazos similares a los de Silverstone. “Tenemos confianza en que los cambios van a tener los efectos deseados”, dijo la GPDA. “Estamos listos para manejar nuestras monoplazas al límite, como lo hacemos siempre”.
“Pero decidimos que si hay problemas similares durante el Gran Premio de Alemania, nos retiraremos inmediatamente de la carrera, porque este problema ‘evitable’ pone aún más en peligro la vida de los pilotos, de los comisarios de carrera y de los espectadores”, advirtieron los corredores.